Un año después de sufrir un atraco en su apartamento de París el miedo aún estremece a Kim Kardashian, que teme por su seguridad cada vez que sale de casa. Algo que hemos podido ver en un fragmento del último capítulo de su reality, Keeping up with the Kardashians, en el que la celebridad rompe a llorar y sufre un ataque de pánico al no sentirse segura en la casa de su amigo Joe Francis en México, a donde viajó junto a unas amigas para celebrar el cumpleaños de su hermana Kourtney.
Alejándose de sus compañeras de viaje, Kim se encerraba en una de las 20 habitaciones de la mansión para mostrar su inseguridad a su amigo y dueño del lugar en el que se alojaban. "¿Puedes hablar un segundo? Simplemente es que tengo ansiedad. ¿Estás seguro de que esto es seguro?", le confesaba entre lágrimas y tirada en la cama mientras escuchaba a Joe, que no hacía más que prometerla que estaba segura.
A pesar de la tranquilidad que podría tener al tratarse de un lugar conocido al que la familia ya ha viajado en otra ocasiones, Kim confiesa que desde el aeropuerto sentía el miedo a volver a sufrir un nuevo atraco. "Desde París siempre pienso en el peor escenario posible. Es cierto que tenía muchas ganas de hacer este viaje pero no tenía ni idea de que me iba a sentir así. Me di cuenta tan pronto como bajamos del avión. Empecé a pensar en todas las personas del aeropuerto que iban a ver a 18 chicas con bolsos de Chanel y Louis Vuitton. Somos el mayor blanco de la historia", confiesa.
A pesar de todo y según ha mostrado la mayor de las hermanas Kardashian, ese fin de semana resultó de lo más divertido y Kim acabó relajándose y disfrutando junto al resto de amigas de la fiesta de cumpleaños de Kourtney, que cumplió 38 años el pasado mes de abril.
- La nueva ‘obsesión’ de Kim Kardashian en las redes sociales
No es la primera vez que vemos a la dueña de la firma de cosméticos KKW Beauty mostrando públicamente su miedo tras este incidente que claramente ha marcado un antes y un después en su vida. Hace unos meses y ante la presentadora Ellen Degeneres, la mujer de Kaney West se derrumbaba al contar como había ocurrido todo y qué supuso para ella vivir aquella difícil situación en la que llegaron a ponerle un arma en la cabeza.
Desde entonces Kim ha cambiado radicalmente, admitiendo que da mucha menos relevancia a las cosas materiales y que desde entonces tiene pánico a lucir joyas. Tal vez por ello este año ha preferido que por su aniversario, el cantante y ella solo viajasen y disfrutasen de unos días juntos.