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Esta noche visita El Hormiguero el cantante Sergio Dalma, que el próximo 6 de octubre publica Vía Dalma III, la tercera entrega de su particular homenaje a la música italiana. El cantante parece haber estado muy centrado en la preparación de este trabajo, ya que, salvo por el Disco de Platino que recibió en febrero de este año por su 17º disco, Dalma, poco más se ha podido saber de él en los medios de comunicación.
En los 25 años de su carrera musical, Dalma siempre ha sido muy celoso de su intimidad. Sin embargo, una de las últimas noticias que protagonizó fue el año pasado por estas fechas, cuando se conoció la reconciliación con su hijo, Sergi Capdevila, tras haber estado más de un año sin hablarse y con una sentencia judicial de por medio. El principal motivo que dio pie al distanciamiento con su primogénito fue la decisión de Sergi de abandonar los estudios para dedicarse al mundo del espectáculo: "Yo no he intentado que él estudie una carrera, ojalá, pero sí que al menos tenga una base para que el día de mañana pueda desarrollar su vocación, pero con ese mínimo que necesitas", explicó entonces.
Segi Capdevila nació en agosto de 1995 fruto de la relación del cantante con Maribel Sanz, con quien estuvo casado algo más de tres años. En cuanto a Carmen Recio, su manager y expareja, mantiene una muy buena relación que ambos demostraron ante Susanna Griso en una entrevista que el cantante concedió para su programa Dos días y una noche el pasado año. Entonces reconoció que había tenido pocos periodos de soltería entre relaciones, algo que considera "un error" porque cree que puede traerle problemas a la hora de volver a convivir con otra persona.
Sergio Dalma se definió a sí mismo como "muy pasional" y aseguró que ha estado atrapado en relaciones por el "componente sexual". Por otro lado, en una entrevista concedida a ¡HOLA! en 2015, aseguró que cree que “el amor sigue siendo uno de los motores de este mundo, la gente no puede vivir sin amor”, y que por eso no se cansa de cantar a esta emoción. Aun así, piensa que el amor es "un estado pasajero que tiene su período de caducidad”. También confesó que ha hecho alguna que otra locura por amor y la mayor de ellas fue coger el coche de madrugada e irse al otro lado del país.
Preguntado en la entrevista de Griso por su imagen de galán, el artista confesó que es muy coqueto con su ropa y que cuida mucho su condición física, además de que no le importaría medir "20 centímetros más" de los 1,71 metros que mide. También contó que de pequeño era un niño con "orejas de soplillo", que su madre intentaba controlar con esparadrapos, y que después de una época siendo un "niño tirillas", pasó a una etapa de su juventud en la que estaba "gordo".
Por otro lado, habló de su gran pasión por el fútbol y el Real Madrid: él también jugaba en un equipo, al que llamaban "los ortopédicos", debido a una publicidad que llevaban en su equipación. Pese a ello, Dalma confesó que era "muy malo" en el terreno de juego.
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