Brooke Shields, de 52 años, la bella actriz que nos cautivó en los ochenta con la película El lago azul, ha sido la última actriz que ha confesado que rechazó una cita con Donald Trump hace casi dos décadas. La actriz lo contó de un modo anecdótico en el programa Watch What Happens Live, presentado por Andy Cohen.
“Estaba rodando una película y me llamó en cuanto tuvo el divorcio -de su segunda mujer, Marla Maples-”, confesó durante su aparición en televisión. “Y me dijo: ‘Creo de verdad que deberíamos tener una cita porque tú eres el cielo de Estados Unidos y yo soy el hombre más rico de Estados Unidos. A la gente le encantaría”, le dijo Trump a la actriz, por entonces en pleno auge de su carrera. “Tengo novio, y no va a estar muy contento con ello”, fue la respuesta que le dio la actriz, que entonces tenía 34 años frente a los 53 de Trump. Ambos coincidieron en el episodio I’ll See That and Raise You Susan de la serie de televisión De repente, Susan.
En aquella época Donald Trump parecía tener cierta fijación por las actrices. A finales de la década de los noventa, Emma Thompson también le dijo "no" a Donald Trump. El magnate la invitó a salir cuando todavía no tenía firmados los papeles del divorcio de Maples, y esta le rechazó. A las confesiones realizadas por Brooke Shields y Emma Thompson se suma la anécdota revelada por Salma Hayek. La actriz mexicana contó que el actual presidente de EEUU la invitó a salir hace unos años, después que se conocieran en un evento al que ella había acudido con su novio. “Cuando conocí a ese señor, yo tenía novio. Él trató de hacerse amigo de mi novio para conseguir mi teléfono. Una vez que lo consiguió dejó de hablar con él y después me llamó para invitarme a salir. Cuando le dije que no saldría con él, salió publicado que el propio Trump es quién me había rechazado por bajita".
Candice Bergen, célebre por la serie Murphy Brown, también reveló en televisión que cuando tenía 18 años tuvo una primera y única cita con Trump. Ambos nacidos en 1946, fueron juntos a la Universidad de Pennsylvania. Ella era una de las estudiantes más atractivas y él el futuro presidente USA, pero su primera cita no prosperó. “Llegó a recogerme en un traje de tres piezas color borgoña, zapatos de cuero y una limusina". ¿Excesivo para una primera cita? Hablamos de Donald Trump, no entiende de excesos. Obviamente, la cita terminó antes de lo esperado.