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Si hace unos días Clara Lago adelantaba los primeros pasos de su cambio de look en un divertido vídeo publicado en su cuenta de Instagram, ya por fin se ha dejado ver en público luciendo su nueva imagen. Con melena midi varios tonos más claros y flequillo, la actriz asistía al homenaje recibido por su novio, el cómico Dani Rovira, en su tierra natal, donde ha sido nombrado Hijo Predilecto de Málaga. Orgullosa de su larga melena oscura desde hace muchos años, ¿cuáles han sido los motivos de este sorprendente estilismo?
“Madre del amor hermoso, hace que no tengo este pelo desde que tengo tres años”, reía Clara sentada en el salón de belleza con el mechón recién cortado en la mano. La madrileña no parecía estar demasiado convencida de la drástica decisión, no obstante, las exigencias de su nuevo papel han sido las que la han llevado a este cambio. Ella misma dio una pista sobre su metamorfosis en el comentario que acompañaba a las imágenes: “Transformándome en Bea...”.
La estrella dará comienzo en poco tiempo el rodaje en Barcelona de su nueva película, Gente que viene y bah, en la que se meterá en la piel de Bea, una joven y exitosa arquitecta que, tras ser abandonada por su novio, decide volver al hogar familiar en el pueblo para comenzar de nuevo. Junto a ella en este nuevo proyecto se encuentran nombres tan conocidos como Carmen Maura y Alexandra Jiménez, que darán vida a su madre y hermana respectivamente.
Dirigida por Patricia Font -ganadora de un premio Goya por el cortometraje Café para llevar en 2014- se trata de la adaptación cinematográfica de la novela de Laura Norton del mismo título y llegará a los cines el 22 de junio de 2018.
A la espera de ver las primeras imágenes de Clara en el film, lo cierto es que en la vida real se ve muy favorecida con el cambio. La protagonista de Ocho apellidos vascos, de 27 años, muestra una imagen muy fresca y juvenil completamente distinta a lo que solía acostumbrar.
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