María José Campanario regresa a la clínica para seguir con su tratamiento
La mujer de Jesulín de Ubrique se encuentra en el centro hospitalario El Seranil en Málaga desde julio
Como ella misma contó a la revista ¡HOLA!, María José Campanario está siendo tratada en el centro hospitalario El Seranil en Málaga para que le “regulen la medicación del dolor, el sueño y la alimentación” a consecuencia de la fibromialgia que padece. En pleno proceso de recuperación, la mujer de Jesulín de Ubrique, ha tenido que ingresar de nuevo en el centro.
Según han contado en el plató de Sálvame, después de cinco días en casa, en torno a las doce de la noche del martes María José Campanario fue vista regresando al centro acompañada por Jesulín –que está siendo su mejor apoyo en estos momentos- y por su hermano Diego. Si bien en un principio esto no sería un motivo para hacer saltar las alarmas, ya que al parecer estas entradas y salidas son habituales en este proceso de recuperación para poder seguir la evolución de su tratamiento.
“Mi mujer está mejorando por días. Ahora es cuando empezamos a ver la luz. Han sido unos meses muy duros. He hecho miles de kilómetros yendo y viniendo a Málaga todos los días”, contó el torero a principio de mes en la revista ¡HOLA!, unos desplazamientos que parece que van a continuar hasta que su mujer se recupere de una enfermedad con la que lleva lidiando desde hace doce años. "He llorado mucho, he estado muy hundida, he llegado a no poder levantarme de la cama, a sentirme inútil, a no poder soportar el dolor... pero lucho cada día y sonrío con optimismo para que esta enfermedad no pueda con mi vida", explicó la odontóloga a la revista cuando se vieron obligados a posponer su boda.
Los últimos meses han sido complicados para ellos ya que la mujer del diestro ha sufrido varios ingresos por fibromialgia al padecer un dolor tan fuerte que la única manera de paliarlo era recibir medicación por vía intravenosa en el hospital. “Voy muy bien, ha costado mucho dar con el tratamiento acertado para mí porque hay muchos medicamentos que no tolero, pero ya están dando con el adecuado para que pueda hacer vida normal e intentar evitar acudir al hospital en cada crisis”, explicó a ¡HOLA!. “Necesitaba que me ayudaran a regular el sueño, no descansaba. He llegado a dormir tres horas en una noche y eso es muy difícil de aguantar”, aseguró Campanario. Este proceso además provocó que su alimentación se viera afectada y en la clínica un nutricionista que le ha puesto una dieta sana para que recuperar fuerzas.