,type=downsize)
Fue una final de infarto. Alba Carrillo, José Luis –fue él quien se llevó el premio- y Laura M. Flores se jugaban el premio de Supervivientes, en Madrid, una ocasión especial que además coincidió con el momento de reencontrarse con sus familiares y amigos. Las emociones estaban a flor de piel para todos, ya que han sido tres meses de aislamiento y de vivencias muy difíciles que les han puesto al límite. Laura M. Flores se quedó a los pies del podium y fue eliminada de la gran final, aunque recibió su mejor regalo.
A su llegada estaban sentados entre el público su padre Kiko Matamoros, su hermano Diego y su novio Benji, a los que recibió con una gran alegría. Un beso a su novio, al que ha echado mucho de menos, y un abrazo interminable a su padre, que ha aprovechado la ocasión para agradecer a los incondicionales de su hija el apoyo recibido durante el programa. Además, en ese momento no se conocían los resultados aún de la final, el colaborador ha alabado el paso de Laura por el concurso.
Sin embargo, a Laura le esperaba aún una sorpresa. Fuera del plató y en una sala privada, como era su deseo, la madre de Laura, Marian esperaba ansiosa el momento de abrazar a su hija. El presentador Jorge Javier Vázquez le anunciaba así a la concursante la presencia de su madre: “Ha venido a Mediaset una persona que jamás tú pudiste llegar a pensar que vendría”. Con la pista de que era alguien de su familia y que también ha trabajado en televisión, Laura lo adivinó –Marian, hermana de Mar Flores, fue azafata en el concurso Un, dos, tres-.
© Cordon PressSe abrazaron entre lágrimas, ninguna pudo contener el llanto. “Cuánto te he echado de menos, cuánto te quiero. Para mí eres una superviviente, eres mi ganadora” repetía Marian. Y Laura la miraba y le decía que ella también la había extrañado y que estaba muy guapa. “Estás muy guapa, esto para ti es imposible” le decía Laura y apuntaba: “No le gustan nada estas cosas”. "Todos los concursantes que han pasado por la isla han sido unos buenos supervivientes, pero para mí, mi hija es la ganadora" reiteró Marian al presentador Jorque Javier. Laura se quedó finalmente con un tercer puesto en un programa de infarto que fue todo un éxito de audiencia (33,1%).
Marian, hermana de Mar Flores, fue una de las azafatas del conocido programa Un, dos, tres en sus inicios. Sin embargo, no continuó con su carrera en televisión tras su andadura en este espacio, retirándose de la vida pública. Ha llevado una vida muy discreta hasta que sus hijos Diego y Laura han alcanzado la popularidad, a pesar de que no ha participado tampoco entonces en ningún programa de televisión. Esta es la primera vez que aparece ante las cámaras en estos años y la ocasión lo merecía.
