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Han pasado 14 años del estreno de la primera parte de Piratas del Caribe y el pasado 24 de mayo llegó a los cines la esperada quinta entrega: La Venganza de Salazar. Una película que, desde su estreno, ha encabezado la lista de las filmes más taquilleros de nuestro país.
La ficción protagonizada por Johnny Depp, Keira Knightley y Orlando Bloom sigue despertando un enorme interés en el público. Una historia por la que Knightley, una de las actrices más queridas de la serie de películas, no apostaba en un principio y cuyo papel de Elizabeth Swann estuvo a punto de rechazar. Con motivo del estreno de la secuela de Love Actually, el director de la comedia romántica, Richard Curtis, confesó en una entrevista a Radio Times que la actriz tenía serias dudas cuando le ofrecieron trabajar en La Maldición de la Perla Negra: “Recuerdo a Keira diciendo que su próximo proyecto era una cosa de piratas… probablemente un desastre”. Sin embargo, la decisión de seguir adelante acabó encumbrando su carrera.
Piratas del Caribe ha conseguido, a lo largo de todos estos años, convertirse en una de las sagas más seguidas de todos los tiempos. La ausencia de Keira en la cuarta película, así como en el primer tráiler de la quinta, dejaba pocas esperanzas para sus fans. No obstante, con el tiempo acabó confirmándose la presencia de la actriz en La Venganza de Salazar.
Según explicaba Brenton Thwaites (una de las últimas incorporaciones a Piratas del Caribe) en una entrevista para Huffington Post, el guion original de la película no incluía a Elizabeth Swann entre sus líneas: “Creo que se añadió después. No estoy seguro, pero creo que se escribió después. Las escenas con Elizabeth Swann se grabaron 14 o 15 meses más tarde de que hiciésemos el cartel de la película”. Según publican en el mismo diario, la actriz había comentado hacía tiempo que no volvería a participar en ninguna “película de piratas”, algo que explicaría el porqué los guionistas y directores no contaron con ella en un primer momento.
Con la fiebre pirata que está despertando la quinta entrega, las declaraciones de Thwaites para el medio británico dejan abierta la posibilidad de nuevos capítulos de la saga. "Me gustaría tener más escenas de Piratas con Elizabeth Swann en el futuro. No he compartido mucho con el personaje de Keira, pero el final de la película apunta a que es el principio de algo nuevo. Hay muchas posibilidades. Parece que irá hacia alguna parte”.
Estas no han sido las únicas curiosidades que han rodeado al film durante el rodaje. Johnny Depp, actor sin el cual no se podría concebir la serie de películas, generó diferentes polémicas que finalmente han conseguido no afectar a la producción de Disney.
La primera llegó desde el propio set y atacaba directamente a la profesionalidad de Depp., cuando se filtró la noticia de que el actor había pagado a un técnico de sonido para que le chivara sus diálogos a través del pinganillo, y así, evitar tener que aprenderse las líneas del guion. La teoría procedía nada más y nada menos que de sus antiguos representantes, The Management Group, con quienes se vio envuelto en una dura batalla legal. La segunda, tras el escandaloso y mediático divorcio del actor con Amber Heard que incluyó un supuesto episodio de malos tratos y que hizo que desde la propia factoría decidieran reducir la presencia del Capitan Jack Sparrow en el tráiler del largometraje.
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