El pasado día 1 de junio, el locutor de Yu, no te pierdas nada, Dani Mateo, soplaba las velas de su 38 cumpleaños. Un día muy especial que quiso celebrar haciéndose un tatuaje en la parte externa de su brazo izquierdo.
Se trata de un complejo dibujo formado por distintas piezas que se unen en una especie de puzle geométrico que mezcla las moléculas de la naturaleza y la anatomía humana en un salvaje conjunto. Un diseño realizado por el ilustrador y tatuador Dani Sanz, que ha obtenido una gran aprobación por parte de los seguidores de ambos.
Este no es el primer tatuaje del comunicador. El verano pasado, coincidiendo con su separación de la actriz Elena Ballesteros, Mateo se tatuaba un pequeño rayo en la muñeca con el que rendía su particular homenaje a David Bowie, fallecido tan solo unos meses antes.
Dicen que quien se tatúa pronto siente la necesidad de seguir grabando su cuerpo con tinta. Por eso, y a pesar de que antes de iniciarse en el mundo del tatuaje se mostraba un tanto irónico ante esta tendencia, el conductor de Yu incorporaba a su hombro una enorme calavera mexicana poco después de realizarse su primer tattoo.
Después de poner fin a su matrimonio con Ballesteros, Dani Mateo decidió dar a su vida un giro de 180 grados. El humorista empezó cambiando su residencia al céntrico barrio de Malasaña, uno de los más populares y modernos de la capital. Una zona con la que no solo ha sabido mimetizarse a la perfección añadiendo tatuajes ‘hípsters’ a su piel, sino que también ha sido el lugar elegido por el periodista para empezar su nuevo proyecto empresarial, un bar, que se ha convertido en su refugio ‘ideal’.
Ballesteros reconocía, precisamente el día del cumpleaños de su ex, que se encontraba en “trámites de” enamorarse, algo que de momento el actor parece no haber conseguido. No obstante, a pesar de que nadie ocupa su corazón, la vida sonríe a Mateo en esta etapa de soltería.