Jim Carrey está dispuesto a comenzar una nueva vida. El actor, de 55 años, deja atrás su faceta de cómico para centrarse en su nueva faceta como escritor y productor. "Jim Carrey es un gran personaje y me siento muy afortunado de haberlo interpretado. Sin embargo, siento que ya no lo soy más". Así de claro habló Jim Carrey en el programa de Jimmy Kimmel, en el que aseguró que en su nueva vida ya no hay hueco para la persona que ha sido durante tantos años y que ha acabado convirtiéndole casi en un personaje.
El protagonista de La máscara o El show de Truman acudió a a la presentación de la serie americana de televisión en la que es productor I’m Dying Up Here que se estrenará el próximo 4 de junio. “Yo solía ser un tipo que estaba experimentando el mundo y ahora siento que son el mundo y el universo quienes están conociéndome a mí", explicaba a Kimmel y añadía: “La vida es muy bella, especialmente cuando estoy ausente de ella”. Carrey será el encargado de producir la nueva comedia negra de Showtime que protagonizarán Melissa Leo, Clark Duke y Ari Graynor sobre los cómicos que actuaban en pequeños locales de los Ángeles en los años 70.
Estas declaraciones sumadas a la apariencia física del actor no han dejado de impactar a sus seguidores. Sobre su nueva imagen que incluye una barba profusa y desaliñada, Jim señala que se trata de un añadido físico que “ha tomado su propia vida”: “La gente no piensa en otra cosa más que la barba. Todo el mundo habla de ella. Creo que es una estrella aparte. Incluso tiene su cuenta de Twitter”, concluyó haciendo gala de su sentido del humor.
Carrey se había mantenido alejado de los medios desde que en septiembre de 2015 su exnovia, la maquilladora Cathriona White, se quitara la vida, días después de que terminaran su relación. Desde entonces se vio envuelto en polémica ya que el actor fue demandado tanto por el marido de su exnovia como por la madre de la fallecida, quienes culparon a Carrey del suicidio. El actor y productor podría ir a juicio en abril de 2018 después de que una jueza de la Corte Suprema de Los Ángeles decidiera abrir el proceso judicial y admitir a trámite las denuncias que acusan al intérprete de haber sido el que le hubiera proporcionado los medicamentos que ella utilizó para quitarse la vida.