Bianca, hija de Nieves Álvarez, diseñadora de su propio vestido de comunión
Un acontecimiento familiar volvió a reunir a Nieves Álvarez y Marco Severini el pasado sábado 6 de mayo. Ese fin de semana, sus mellizos Bianca y Brando, hijos de la modelo y el fotógrafo (que aunque llevan dos años separados volvieron a mostrar su buena relación) celebraron su Primera Comunión. Un día importante para cualquier niño en el que Bianca tuvo una oportunidad que no tienen todas las jóvenes de su edad: la de diseñar su propio vestido.
Durante la ceremonia religiosa, la pequeña lució una tradicional túnica blanca, pero después de comulgar cambió su atuendo por un vestido que, siguiendo los pasos de su madre, Bianca se encargó de diseñar con N+V, la firma de moda infantil que surgió como resultado de aunar la pasión por este mundo de Nieves Álvarez y la experiencia como diseñadoras y empresarias de las hermanas Villalobos.
En el taller, donde Bianca acudió acompañada por su madre, la pequeña pudo dar rienda suelta a su imaginación. Desde la marca nos explican que ella misma participó en la elección de los tejidos y se encargó de crear el prototipo sobre el maniquí, colocando los alfileres y probando los detalles. Todo con una enorme ilusión y mucho cariño, dos ingredientes fundamentales para crear su vestido de comunión soñado.
Como en un diseño profesional, la hija de Nieves Álvarez trasladó al papel cada detalle con un minucioso dibujo. Tal y como se puede ver en el boceto, incluyó trocitos de telas y cintas, para indicar al taller cómo había que hacerlo, además de anotaciones explicativas. "Cuerpo de tela bordado", "manga terminada en lazo", "cremallera dorada a la vista y tirador con lazo negro", "falda de rejilla"... ¡está claro que la pequeña sabía bien lo que quería!
"Lo quería combinado y nos sorprendió cuando eligió las rayas en crudo y negro para la espalda", relevaba Nieves en las páginas del último número de ¡HOLA!. Al explicar que este es el primer vestido de N+V diseñado totalmente por Bianca, se mostró muy orgullosa de su hija. No es para menos; parece que el talento fashion ha llegado a la siguiente generación.