Antonio Vega, ocho años de un mito que sigue muy presente

El 12 de mayo de 2009 moría Antonio Vega dejando tras de sí un legado musical y cultural difícil de olvidar

por Gtresonline

Esta semana se cumplen ocho años de la muerte de Antonio Vega. Los homenajes a su figura, como el concierto ofrecido por el grupo ‘El sitio de mi recreo’, no dejan de sucederse cuando aún no ha pasado una década de su ausencia. Éxitos tan grandes como ‘La chica de ayer’, ‘Antes de amanecer’ o ‘Sácame’ salieron de las prolíficas manos de Vega. En 1980 nace el grupo ‘Nacha Pop’, una banda que sirvió de contexto musical a las creaciones del cantautor madrileño. Su amigo, Antonio Carmona aseguraba el día que se marchó: “Se nos ha ido un talismán, una piedra angular de la música española”. Él y otros artistas que compartieron momentos irrepetibles con Antonio han recordado durante estos 8 años los aspectos menos conocidos y anécdotas que vivieron junto él: “En mi disco ‘De aquí a Ketama’ teníamos dos invitados, uno era Antonio Flores y el otro era Antonio Vega. El productor tenía miedo de que no vinieran y él siempre llegaba clavado a su hora, no falló ningún día”.

Miguel Ángel Arenas “Capi” confesó en un programa especial para TVE, emitido tras su fallecimiento, que lo más destacado de Antonio Vega era su carácter autodidacta: “No pertenecía a escuela. Era como un Bosco o un cuadro del Greco que es único”. En una de las pocas entrevistas concedidas por su banda a la cadena nacional, recordaba que sus compañeros le llamaban ‘Antonia’, en un ímpetu por transformar en femenino todos los nombres de los componentes y cuya broma acabó por dar identidad al grupo ‘Nacha Pop’. Un carácter jocoso que, a pesar de su timidez, siempre le caracterizó.

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Una de las relaciones más románticas de Antonio fue la que tuvo con Madrid, que dejó una curiosa lista de lugares donde solía esconderse. Algunos de ellos formaron parte activa en sus principales canciones y aún hoy siguen siendo lugar de referencia para los entendidos de música. Un mapa de la ciudad que mantiene muy viva la figura de Antonio. Uno de los más emblemáticos es el edificio Capitol. Un buque insignia de Madrid que aparece en la portada de su segundo disco. Con más de 40 años a su espalda, la Sala Sol es uno de los locales para conciertos más conocidos de la capital, un lugar que fue inaugurado ni más ni menos que por Nacha Pop allá por el año 1979.

Si se habla de Antonio Vega, no se puede pasar por alto el emblemático ‘Penta Bar’, el local situado en la Calle Palma, en el barrio de Malasaña, que goza de una especial dedicatoria en la canción ‘La chica de ayer’. Su propietario aún guarda la imagen del grupo tras la barra y uno de los murales más conocidos del bar fue pintado por la primera mujer de Antonio y el propio artista.

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La ‘Vía Láctea’, otro bar histórico de la zona de Malasaña, fue el lugar de encuentro de Antonio con sus amigos y conocidos. Allí pasó muchas noches de salidas nocturnas y sus grandes éxitos son la banda sonora del conocido lugar. Muy cerca se encuentra el ‘Teatro Barceló’, edificio que albergara la discoteca Pachá, y donde Nacha Pop dio su primer gran concierto. Se inauguraba allí la historia de sus éxitos.

Y del principio a su adiós definitivo. La ‘Discoteca Jácara’ fue el lugar donde el grupo dijo adiós para siempre antes de que Antonio y Nacho comenzaran sus respectivas andaduras en solitario El final del recorrido nos lleva a Coslada. Junto a Carlos Martos, Antonio Vega grabó su último disco en unos modestos estudios situados en un polígono industrial de la localidad. Uno de los últimos espacios donde el artista dio rienda suelta a su creatividad.