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Hace un mes que fue madre por primera vez y Natalia Verbeke está enamorada de su niña. La actriz disfruta de cada momento con Chiara, a la que está dedicada en cuerpo y alma en sus primeras semanas de vida. La llegada de su hija es un sueño cumplido para la artista que reparte su tiempo entre su bebé, sus amigos y los sus primeros cuidados para recuperarse tras su maternidad. Natalia ha comenzado ya a recibir asesoramiento para quitarse los “kilitos” que le quedaron del embarazo, aunque un mes después de haber dado a luz se la ha podido ver bastante recuperada -durante un paseo con su novio Marcos Poggi-. Un tratamiento que recibe mientras a su hija también le dan masajes para los cólicos -una de las cosas típicas que sufre un lactante-, así que es un rato madre e hija que comparten y a las que la intérprete se refiere como sus primeras actividades juntas.
Estos días ha presentado a la niña a sus amigos y se han acercado para ver a la peque Maribel Verdú y María Esteve. La primera le ha hecho un regalo a Chiara que ha emocionado mucho a su madre por el gran significado que tiene. “Hoy mi amiga Maribel Verdú me ha hecho el regalo más bonito del mundo. Le ha regalado a Chiara “su” pingüino. Su peluche talismán que compró hace varios años cuando le entregaron en Londres uno de sus premios más importantes. Gracias por regalarle a mi hija algo tan valioso para ti. De momento voy a achucharlo mucho yo, a ver si se me pega lo grande que eres, “te quiero mucho amiga!”.
Una imagen siempre vale más que mil palabras y el rostro de Natalia es la perfecta muestra de cómo están siendo estos días como mamá. “Ni filtros, ni ná... AMOR absoluto” escribe la intérprete, que ha formado una familia con el jugador de rugby Marcos Poggi. Mirar a su niña mientras duerme, acunarla... Natalia no se pierde ni uno de los minutos de esta nueva aventura, aunque saca también ratos para disfrutar de algunas aficiones como la lectura. ¿Entre sus favoritos? Los libros de Maxim Huerta, a quien dedica unas cariñosas palabras: “Mi querido Maxim Huerta... gracias por tus libros, tus mundos, tus historias... por regalarnos momentos maravillosos y emoción cada vez que te leemos. ¡Te adoro!”. No cabe duda de que esta etapa está siendo para Natalia una de las mejores de su vida.
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