Cada vez son más los famosos que, lejos de esconderse avergonzados por su pasado, deciden dar el paso de contar sus duras vivencias para así ayudar a posibles víctimas con sus mensajes motivadores. Esta vez ha sido el turno de Kate Winslet que, en un inspirador discurso ofrecido esta semana en Londres durante el WE Day UK, confesaba: “Me acosaron en el colegio. Me llamaban Blubber y se reían de mí porque quería ser actriz. Incluso me encerraron en un armario”.
La actriz, madre de tres hijos en edad escolar- Mia Honey Threapleton (16 años), Joe Alfie Winslet Mendes (13) y Bear Blaze Winslet (3)-, luchó por conseguir su sueño a pesar de que durante años convivió con los duros cánones de belleza impuestos por Hollywood. “No era la más guapa y me dijeron que sería afortunada si conseguía papeles de gordas. Me decían que no era lo que estaban buscado. Esta falta de amabilidad me hizo sentir horrenda", admitía al público que la escuchaba y para los que espera ser ejemplo de los jóvenes que atraviesan una situación parecida a la que ella vivió.
"Nunca tuve un cuerpo perfecto y muy raramente escuché algo positivo así que empecé a sentirme incómoda en mi propia piel. Fue duro, quería renunciar. 'Tal vez debería replantearme esto de la interpretación', me dije a mí misma, pero era mi pasión y me hacía feliz", admitió la ganadora al Oscar a mejor actriz en el año 2009.
Y eso hizo, luchar por su pasión y no dejar que nada ni nadie le detuviese en su intento de ser actriz. “Tuve que ignorar los comentarios negativos. Tuve que creer en mí misma. Tuve que elegir ponerme de pie y trabajar duro. Vosotros debéis ser indestructibles con aquello que amáis y creer que os lo merecéis", continúo la actriz antes de hablar del personaje que inició su espectacular carrera. "Un buen día me seleccionaron para ser ‘Rose’ en Titanic; la candidata más improbable. Kate de la tienda de sándwiches en Reading (pueblo natal de la actriz en Inglaterra) actuando en una de las mayores películas que nunca se hayan rodado. Puedes ser de cualquier sitio y puedes hacer cualquier cosa, créetelo. Es posible que superes tus miedos. '¿Qué pasa si caigo?' ¡A quién le importa! Se tú mismo", finalizaba la actriz.
Confesando que había aprendido a ser cómo es y no pedir perdón por ello acabó diciendo: “Esto es lo que soy. Mi yo verdadero. Kate, de Reading”.