De chef a dirigir el museo de la familia: así es Guillermo Cervera, sobrino de la Baronesa Thyssen
El conocido repostero ha abandonado los dulces para convertirse en el director artístico del nuevo museo Carmen Thyssen Andorra
Siempre ha estado a la sombra de su tía Carmen Thyssen, pero Guillermo Cervera se convirtió ayer en el centro de los focos al convertirse en el nuevo director artístico del inaugurado Museo Carmen Thyssen de Andorra. Este nuevo centro, el primero fuera de España y el tercero con el nombre de la baronesa, fue presentado ayer por su protagonista, que estuvo acompañada de su hijo Borja Thyssen y su nuera Blanca Cuesta, y las autoridades andorranas. A esta foto se sumó como nuevo y relevante miembro, este barcelonés de 47 años afincado en Andorra desde 1993.
Hasta hace unos meses, Guillermo era un reconocido repostero, un mundo en el que se introdujo de forma tardía tras ver en su pasión una forma de realizarse profesionalmente. Y lo hizo. En la última década, ha formado parte del equipo del restaurante Celler de Toni, dónde desarrolló su faceta pastelera llegando a ser finalista en 2013 del World Chocolat Masters. Precisamente durante la presentación del museo Carmen Thyssen de Andorra, el exchef utilizaba un símil repostero comparando su nuevo proyecto con un "perfecto bombón".
Sin embargo, Guillermo no es un desconocedor del mundo del arte. Se formó en museología en Inglaterra y estuvo muy vinculado a la pinacoteca del barón Thyssen durante su época en Suiza. Tras su muerte, continúo con la colección creada por su tía y, según confesaba a El Mundo hace unos meses, “siempre he estado relacionado con su colección, trabajando en la sombra. Aunque no saliera en la foto yo siempre andaba por allí”. Además, su esposa es historiadora y dirige el Museo del Tabaco de San Julián de Loria (Andorra).
Así, y aunque acepta las posibles habladurías sobre su nombramiento, Guillermo Cervera deja claro que además de ser el sobrino de la baronesa, es un buen profesional.
El nuevo museo de los Thyssen está ubicado en la planta baja del histórico edificio del Hotel Valira y cuenta con cerca de 500 metros cuadrados, la mitad de ellos, expositivos. Abre con el objetivo de albergar exposiciones temporales "de largo término", tal y como explicó el propio Guillermo en la rueda de prensa que el pasado mes de enero ofreció en Madrid. La primera exposición será Escenarios, una muestra compuesta por 26 cuadros que recorrerán la historia del arte desde finales del siglo XIX hasta el tercer cuarto del siglo XX.