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Isabel Presyler, a través de una carta de rectificación enviada por su abogado, Javier Ruiz Paredes, al director de El Mundo, ha puntualizado las últimas informaciones referidas al testamento de Miguel Boyer.
En concreto, en relación al artículo publicado en La Otra Crónica (LOC) de El Mundo, el pasado 4 de marzo, que lleva por título 'El testamento de Miguel Boyer solo deja deudas', el abogado señala que se trata de un titular "incoherente con lo luego desarrollado en el texto, pero fundamentalmente es falso, pues de acuerdo con el inventario y liquidación de los bienes y derechos de la herencia, el activo es muy superior al pasivo". Según se aclara en el escrito, "es una intolerable insidia que afecta al buen nombre del Sr. Boyer, y que de ninguna forma la Sra. Preysler va a tolerar".
"Como también resulta intolarable la manifestación que se hace en el texto del reportaje de que el Sr. Boyer 'solo pudo estampar una cruz al pie del documento (testamento) a modo de firma', insinuando con ello dudas sobre su decisión, capacidad y voluntad de testar, cuando lo cierto es que el esposo de mi clienta hacia una vida cotidiana normal dentro de las lógicas limitaciones físicas por el ictus sufrido", prosigue.
La carta aclara que los hijos del Sr. Boyer, Laura y Miguel, "han tenido acceso a toda la información patrimonial de su padre". Asimismo, señala que "el Sr. Boyer determinó en su testamento que sus tres hijos tuvieran un tratamiento idéntico, repartiendo entre ellos dos tercios de su herencia a partes iguales, y dejando a su viuda el tercio de libre disposición. Y para evitar conflictos entre los herederos, designó como Albacea Contador-Partidor de los bienes a su hermano Don Christian Boyer, persona de su aboluta confianza, para que ejecutara su última voluntad".
A Isabel Preysler "le resulta hiriente el gran titular 'Los herederos de Miguel Boyer deben dinero a Isabel Preysler', con el que se encabeza la segunda parte del reportaje, tratando de hacer creer injustamente a los lectores del periódico que está reclamando dinero a los hijos del Sr. Boyer".
"Los gastos por el óbito del Sr. Boyer los pagó su viuda, y nunca ha reclamado el reembolso a ninguno de sus tres hijos. Si ahora el Albacea Contador-Partidor ha previsto en su proyecto de partición de la herencia que se distribuya ese gasto, será porque así lo ha estimado oportuno", recalca.
El abogado de Isabel Preysler, por último, puntualiza que están fuera de lugar las dudas que el texto del reportaje arroja sobre la imparcialidad del Albacea Contador-Partidor, o las menciones a los saldos existentes en las cuentas bancarias al momento del fallecimiento utilizando el entrecomillado 'según a quien te arrimes te arruina la vida' pues, según me indica mi clienta, quien firma el artículo sabe, por estar publicado o, al menos, debería suponer, el inmenso caudal de gastos que supuso la enfermedad y rehabilitación de Don Miguel Boyer, gastos que en gran medida sufragó la Sra. Preysler por no haber fondos en las cuentas de su esposo".
La carta concluye diciendo que el artículo publicado "produce repulsa" a Isabel Preysler, "pues ni se ajusta a la realidad, ni se ha contrastado y, además, su redactado es claramente ofensivo hacia su persona, por muchos entrecomillados o referencias a indeterminados familiares que se hagan en el texto del reportaje".
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