¿Quién ha dicho que Verónica Echegui y Álex García habían puesto punto y final a su relación? Nada más lejos de la realidad, ya que ha sido la propia actriz la que se ha encargado de desementirlo asegurando que siguen juntos. Verónica fue una de las grandes protagonistas de la presentación de la 20º edición del Festival de Cine de Málaga, donde este año va a presentar ni más ni menos que dos películas, La Niebla y la Doncella y la mexicana Me estás matando Susana. "Estoy muy bien, cada vez mejor (...) El amor a uno mismo primero y yo estoy muy bien la verdad", dijo la madrileña, de 33 años, que respondió de una manera muy simpática a la pregunta de si habían pensado dar el gran paso: "Nos planteamos de todo, somos actores y estamos todo el día montándonos películas", dijo riéndose, y añadió: "Lo del altar nunca me lo he planteado porque nunca he necesitado casarme. Mis amigas ya lo han hecho y yo no me siento mal". Eso sí, parece que lo de ser madre es algo que le apetece más: "Si quieres ser madre o no es un tema importante. A mí me gustaría, no sé cuándo, pero ya vendrá... Espero que llegue".
Si en lo personal las cosas no le van nada mal, en lo profesional Echegui tampoco se puede quejar. La actriz, que posó ante los fotógrafos junto a Aura Garrido y Roberto Álamo, con los que comparte cartel en La Niebla y la Doncella, habló del momento profesional en el que se encuentra ahora: "Me apetece hacer más comedia, me lo paso muy bien y no hay que sufrir tanto". Verónica, que si todo sale según lo previsto se va a Italia en un par de semanas a presentar su nueva película, Déjate llevar (Lasciati andare) de Toni Servillo, aprovechó para hablar de la segunda temporada de la serie británica en la que participa, Fortitude. Vuelve a meterse en la piel de su personaje, la camarera Elena Ledesma, en esta serie con la que está encantada porque los actores "son parte del proceso creativo".
No cabe duda de que este trabajo ha significado muchísimo en su carrera y en una entrevista con la agencia EFE aseguraba que ha "hecho familia" con los actores que forman parte del reparto en esta segunda temporada. "A nivel personal ha sido una de las experiencias más bonitas de mi vida y a nivel profesional, el modo de trabajar fue y ha sido muy bonito", confesaba. Aunque se trata de la única serie internacional en la que ha trabajado, explicaba que le llamó la atención el hecho de que para los productores primaran "la historia, que las cosas salieran bien y que se hicieran con tiempo por encima del dinero".
También, que hubiese "mucha libertad para crear y que confiaran mucho en el equipo y en los actores", algo que, en su opinión, también ocurre en algunas producciones españolas, donde le gustaría comenzar nuevos proyectos. "España es mi país, yo quiero trabajar en España porque es mi tierra, porque son historias nuestras, porque me encanta España y no tengo necesidad de marcharme a vivir a ningún lado, pero si aparece una historia interesante y es fuera, claro que quiero hacerla", añadía.