Clea Newman, la hija del mítico actor Paul Newman, madrina de excepción de la película de Paco Arango
'Lo que de verdad importa' está dedicada a Paul Newman
Lo que de verdad importa es el nombre de la nueva película de Paco Arango, que llegará a los cines el próximo 17 de febrero. Una producción que lleva el mismo nombre que la fundación (Lo que de verdad importa), dedicada a promover los valores entre los jóvenes y a inspirarlos a seguir sus sueños. Paco Arango contó, en esta ocasión, con una madrina muy especial, Clea Newman, la hija del mítico actor de Hollywood Paul Newman, a quien esta nueva cinta está dedicada. Ambos filántropos se reunieron en Madrid para presentar este proyecto benéfico, del que hablaron muy orgullosos y emocionados. "Mi padre era un ángel, él creo campamentos en todo el mundo para niños enfermos. La finalidad es que los pequeños pudieran ser niños de verdad y se olvidaran por unos días del hospital", cuenta Clea Newman cuyo legado es lo que más le importaba a Newman, que llegó a donar más de 500 millones de euros a los niños enfermos.
Esta es la segunda obra de Arango, que, una vez más, pretende contagiar el entusiasmo por ayudar a los demás y ser conscientes de que "la vida es un regalo". Arango conoció a Newman años atrás y pudo ser testigo en primera persona de su faceta como filántropo, ya que, a través de su propia marca de aderezos, Newman’s Own, creó la asociación Serious Fun, dedicada a niños enfermos. Paco fue nombrado por Newman consejero de Serious Fun hace años y mantiene este cargo en la actualidad. Clea es la embajadora de los mismos. Este año, ciento veinte niños con cáncer de la Fundación Aladina (creada y dirigida por Paco Arango) visitarán el campamento de Barretstown, en Irlanda, por una semana.
"La peli es cien por cien positiva, pretendo transmitir la fuerza del espíritu a todo el que la vea a través de risas y una historia bonita y familiar", asegura el director, La trama gira en torno a un joven llamado Alex, que vive en Inglaterra y trabaja arreglando aparatos eléctricos en una empresa que no va bien económicamente. Su vida es un completo desastre hasta que un día, su tío Raymond le propone pagar todas sus deudas a cambio de irse a vivir al extranjero durante un año, en concreto, a Nueva Escocia. Una vez allí, descubre que tiene el don de curar a las personas. En su lucha por comprender su nueva realidad, una adolescente con cáncer le mostrará el camino.
Los fondos recaudados a través de la película irán destinados a las fundaciones mencionadas anteriormente, que con su labor mejoran cada día la vida de muchos niños y adolescentes. «Mi padre me enseñó que cuando tienes la suerte de ser privilegiado, es una obligación ayudar a los más desfavorecidos. Él tenía un espíritu de niño, era muy activo y siempre buscaba divertirse. Jugaba mucho conmigo y mis hermanas cuando éramos pequeñas», mencionó Clea, que además añadió sobre su padre: "Echo de menos todo de él, pero, sobre todo, sus consejos; era una persona que siempre sabía qué hacer".