Obama sale y entra Trump, y en la Casa Blanca ocurre lo mismo. Barack Obama y su esposa Michelle se despedirán del que ha sido su hogar los últimos ocho años con las cámaras de televisión retransmitiendo su salida en directo. Los Obama tienen como hora límite las 11:00h (las 17:00h en España). Será entonces cuando el presidente saliente y la primera dama abandonen la Casa Blanca acompañados de Donald Trump y su mujer Melania. Saldrán de la residencia presidencial para dirigirse al Capitolio.
Esta será su salida oficial y ya no volverán al que ha sido su hogar. A las 17:00h (las 23:00h en nuestro país) llegarán los nuevos inquilinos de la residencia. Sin embargo, Melania no se instalará en la Casa Blanca tras la investidura de su marido. La Primera Dama ha decidido quedarse en la Gran Manzana hasta que su hijo Barron, de 10 años, concluya su año escolar. “Volveremos a vivir juntos cuando Barron termine la escuela”, confirmó Trump.
Un hecho inusual, ya que todos los Presidentes han vivido en la Casa Blanca con su familia tras la investidura, una tradición que se remonta a la administración de John Adams, en 1800. Excepto el presidente Henry Harrison (1841), que no tuvo tiempo de instalarse en la residencia oficial con su familia debido a su inesperada muerte un mes después del juramento del cargo.
Volviendo a la mudanza, el personal de la Casa Blanca tiene seis horas para sacar las pertenencias de los Obama y dejarlo todo tal y como los Trump hayan pedido. Un tiempo récord para hacer dos mudanzas que necesita el engranaje perfecto de los 93 operarios de la residencia, que trabajarán con la precisión de una maquinaria suiza.
Quizás para hacerlo más fácil, ayer ya se pudo ver a los operarios sacando butacas, sillas y libros propiedad de los Obama aunque será en estas seis horas cuando se lleve a cabo la 'gran operación'. Al mismo tiempo en el que millones de personas de todo el mundo estarán pendientes de la retransmisión en directo de la toma de posesión del 45º presidente de los Estados Unidos, trabajarán contrarreloj para conseguir que cuando llegue la familia presidencial la decoración siga las directrices marcadas por el diseñador de interiores elegido por los Trump, cuyo nombre se desconoce de momento.
Los Obama confiaron la decoración de la Casa Blanca al diseñador de interiores Michael Smith. Fue Laura Bush la encargada de ensañar personalmente a Michelle las dependencias del ala este, destinas al uso privado de la familia. “Espero dar nuestro propio toque al ala Este y crear espacios para ser vividos donde nuestra propia familia se sienta cómoda, feliz y asentada”, dijo Michelle. El matrimonio ha dejado de herencia a los Trump su huerto ecológico y una cancha de baloncesto que, al parecer, va a ser sustituída por un campo de croquet
Pero los cambios no sólo llegan al ala este. El ala oeste sufrirá este viernes una profunda renovación. Cambio de pintura, moquetas y alfombras en todas las salas y, con especial énfasis, en el despacho oval. Redistribución de los departamentos, cambios de mesas y de cuadros así como de los bustos de presidentes precedentes. No se trata de una medida excepcional a causa de la llegada de Donald Trump, se trata de la norma habitual cada vez que un nuevo Presidente asume el Gobierno de los Estados Unidos.
La decoración de la Casa Blanca contrasta con la decoración del impresionante ático de Nueva York de los Trump. La mansión presidencial, que fue ideada por George Washington y construida en 1790 bajo la dirección del arquitecto irlandés James Hoban, posee un estilo neoclásico muy depurado, totalmente opuesto al estilo rococó de su vivienda. Lujo, lujo y más lujo a golpe de oro.
El Presidente ha prometido que no va a imponer su opulento estilo en la Casa Blanca. "Es un lugar muy especial, allí voy a trabajar, no a decorar", ha reconocido. Melania, por su parte, desea tener su propia sala de maquillaje en la residencia oficial, según ha declarado a Us Weekly su maquilladora, Nicole Bryl.