Entre otros amores, el palacio de Carlos Falcó ha sido testigo del 'romance' de Blanca Suárez con Rubén Cortada

En la casa familiar de El Rincón, propiedad del Marqués de Griñón, se han rodado algunas escenas de 'Lo que escondían sus ojos'

por hola.com

La miniserie Lo que escondían sus ojos se despidió este martes como líder de audiencia (19.2%). La ficción de Telecinco protagonizada por Blanca Suárez –como Marquesa de Llanzol- y Rubén Cortada –como Ramón Serrano Súñer, cuñado de Franco- narra un romance que no trascendió a la sociedad de la época. Una trama que ha trasportado al espectador al Madrid más exclusivo de los años 40 y en el que la casa familiar de Carlos Falcó ha tenido una papel casi casi protagonista.

El Rincón, ubicado en la realidad en la localidad madrileña de Aldea del Fresno, se convierte en este tv-movie en una de las residencias de veraneo de San Sebastián en la que se desarrolla parte de la historia. Esta propiedad del Marqués de Griñón es un espectacular palacio del siglo XIX al que se accede tras un imponente portón de hierro forjado y rodeado de cinco hectáreas de campo, entre las que se encuentran algunos viñedos y zonas verdes cuidados con mimo como el Jardín de las Mimosas, el Jardín de los Perros o el Jardín de la Grava.

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Almenas y una gran torre envuelven esta residencia y la convierten en la ficción en el lugar perfecto como escenario para los miembros de la alta sociedad de la época. Aunque es la casa familiar de Marqués y como su hija, Tamara Falcó, ha contado a ¡HOLA! en alguna ocasión, allí guardan estupendos recuerdos en familia, los fines de semana esta residencia se alquila para bodas o eventos. Desde sus exteriores con patios empedrados hasta el interior de la casa, con una imponente escalera señorial escalera de granito o sus fabulosos salones.

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Eso sin olvidar que este Palacio cuenta con su propia capilla, aquí fue en donde en noviembre de 2012 Julio Iglesias Jr. y Charisse Verhaert se dieron su primer “sí, quiero”. Una ceremonia íntima a la que siguió un coctel y una fiesta en la que casa fue testigo de momentos románticos, reencuentros y muchas anécdotas. Un enlace que tuvo lugar un año después de que Tamara Falcó –que actualmente está volcada en su faceta como diseñadora- emprendiera la aventura de gestionar la propiedad de su padre para la organización de eventos.

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El Palacio Duarte de Madrid, el Museo Lázaro Galdiano, la Iglesia de San Jerónimo el Real o la Real Basílica de San Francisco El Grande son otras de las localizaciones emblemáticas en las que se ha rodado Lo que escondían sus ojos. Una casa de la localidad segoviana de El Espinar sirvió para ambientar la residencia principal de los marqueses de Llanzol, mientras que en un chalet de Villafranca del Castillo se recreó el domicilio de la familia Serrano Súñer.

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Eso sin olvidar alguna escena en lugares icónicos de la capital como el restaurante Lhardy o el casino –en donde se rodó el primer encuentro entre la Marquesa con Serrano Súñer- y la playa de la Concha de San Sebastián, uno de los lugares de verano favoritos de la élite aristocrática de la época.