¿Recuerdas a David Castillo, Jonathan en la serie 'Aida'? No le vas a reconocer con su nuevo 'look'
El actor tiene ahora casi 24 años y ha cambiado radicalmente de imagen
Si eres uno de los miles de espectadores que siguieron durante casi una década los enredos de Aída y su familia en la serie que llevaba su nombre, probablemente no hayas olvidado al divertido y algo gamberro Jonathan. David Castillo fue el actor que se encargó de interpretar al hijo de la protagonista durante las diez temporadas de la serie. Le conocimos siendo prácticamente un niño y así es como la mayoría le recuerda, pero David tiene ahora casi 24 años y poco queda del adolescente que tantos quebraderos de cabeza dio a Carmen Machi en la ficción.
El actor madrileño, que comenzó su carrera con apenas siete años, continúa volcado en el mundo de la interpretación. Ha dado el salto de la pantalla a los escenarios y actualmente está concentrado en el inminente estreno de una nueva obra con la compañía joven de Teatro Clásico Nacional, una versión de la comedia Pedro de Urdemalas, de Miguel de Cervantes. David acudió al programa Pasapalabra para promocionar su trabajo, pero su nuevo proyecto no fue lo único que llamó la atención del público.
El intérprete está prácticamente irreconocible con su nuevo look, muy distinto al que lució durante sus años en Aída. David se ha dejado crecer el pelo, presumiendo ahora de una larga melena rizada. Con grandes gafas redondas y algo de barba, sosprendió lo mucho que ha cambiado desde que interpretó a Jonathan, cuando llevaba el pelo más corto y oscuro, peinado en una cresta y, a excepción de un anecdótico episodio, nada de gafas. Lo que sí mantiene es el pendiente en su oreja, algo muy característico de su personaje.
Su nueva imagen desató algunas bromas en el plató de Pasapalabra, y ni siquiera él mismo pudo contener la risa cuando, durante la prueba musical, el presentador Christian Gálvez comentó que estaba viendo a "David Castillo, cantando por George Michael con el look de Fito Páez".
Al margen de su renovado estilo, David se mostró tan simpático y divertido como siempre, y muy entusiasmado por su nuevo papel en la obra de Cervantes, que le mantendrá ocupado como mínimo hasta enero.