¡Ya está! La lista completa de participantes en el festival de Eurovisión está finalizada. Después de celebrarse la segunda semifinal en el Globen Arena de Estocolmo los participantes ya cuentan las horas para enfrentarse a la gran batalla. La final es en poco más de 24 horas y los nervios comienzan a estar a flor de piel, sobre todo tras los sorprendentes resultados de esta segunda criba. ¿Qué ha pasado en la semifinal?
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Sorprendentemente el festival de este año se ha quedado sin representación de países nórdicos dado que han sido todos eliminados en las votaciones, excepto claro el anfitrión Suecia, que tenía su plaza asegurada. Letonia, Georgia, Bulgaria, Australia, Ucrania, Serbia, Polonia, Israel, Lituania y Bélgica fueron los ganadores de esta segunda fase en la que de nuevo se cuela Australia y su Sound of silence de Dami In, una balada que ha logrado meterla en la final.
Hubo además alguna que otra sorpresa ya que Georgia y Bulgaria, que no habían obtenido muy buenos pronósticos en las casas de apuestas han conseguido el pase. De hecho Bulgaria llevaba sin alcanzar una final desde 2007. Por supuesto otra de las que suenan como posibles ganadores Jamala, representante de Ucrania, ha conquistado el voto con su historia real sobre la deportación de los tártaros en Crimea (un relato que le contó su abuela).
La 'fiebre eurofan' que invade Estocolmo, en cifras e imágenes
Con las manos vacías tras haber peleado sobre el escenario se van Dinamarca, Noruega, Suiza, Irlanda, paradójicamente este país ha sido el que más veces ha ganado el certamen, Eslovenia, Macedonia, Albania y Bielorrusia. Se marchan dejando tras de sí a compañeros y amigos que pelearán por la victoria.
España actuará en la segunda parte del certamen, en el puesto 19, una posición que podría darle suerte. De momento Barei está recibiendo el calor y cariño de los fans en las diferentes actuaciones que hace en Estocolmo, por ejemplo en la Eurovillage, donde ha interpretado Say yay! delante de más de un millar de personas. Fuerza, ritmo y sobre todo muchas ganas. ¡No queda nada! ¡Ánimo Barei!