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El pasado viernes, 25 de marzo, Mar Flores y Javier Merino anunciaban su separación tras más de 18 años juntos y cuatro hijos en común. Nada hacía presagiar este final en una pareja que en los últimos tiempos se había enfrentado unida a las distintas causas judiciales abiertas contra el empresario. Aunque ambos habían pedido a los medios que respetaran su privacidad, Javier Merino rompió su silencio asegurando que su ruptura no se debía ni a terceras personas ni a dificultades económicas. “La última decisión la he tomado yo. La relación se desgasta y es mejor tomarla ahora antes de que termine de estropearse”, declaró el empresario en ¡HOLA!. “Somos muy distintos y al final las diferencias se van acentuando. Esto no es de ahora, llevábamos varios meses atravesando una crisis”, añadió.
Javier Merino confesó que Mar Flores estaba "un poco más asustada" que él, y que se había "ido a descansar a casa de su hermana". "Sé que estamos haciendo lo que había que hacer, aunque es triste porque son muchos años y al final el proyecto de familia no sale como habíamos esperado", reconoció. El empresario aseguró que no habían decidido separse "para dar marcha atrás dentro de tres meses", pero que nunca se sabe "lo que pasará dentro de un año". Según contó en ¡HOLA!, mantendrán una relación cordial por el bien de sus hijos: Mauro, de 12 años, Beltrán, de 10, y los mellizos Bruno y Darío, de cinco. "Tenemos la custodia compartida y en la casa, que es de los niños, vivirá Mar. Yo entraré y saldré prefectamente bien. En teoría los niños no tendrían que notar nada. Hay respeto", subrayó.
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La respuesta de Mar a estas declaraciones no se ha hecho esperar. En su cuenta personal de Instagram ha compartido la siguiente reflexión: "Nunca confundas silencio con ignorancia, calma con aceptación o amabilídad con debilidad". También se ha tomado con humor el difícil momento que está atravesando al escribir: "Y como dice una amiga... si la vida te da limones, haz limonada".
Mar Flores y Javier Merino se casaron en el año 2001, cuando ya llevaban más de dos años de relación. La pareja celebró su boda en el cortijo Torre de la Reina, en la localidad sevillana de Guillena el 25 de octubre de 2001. Fruto de su matrimonio han nacido cuatro niños: Beltrán, Mauro y los mellizos Bruno y Darío. Ella, además, es madre de Carlo, hijo de Mar y su exmarido, el aristócrata italiano Carlo Constanzia.
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