La modelo Mar Flores y el empresario Javier Merino, su marido desde hace 15 años, han puesto fin a su relación "de forma temporal" después de casi dos décadas de amor. Así lo ha dado a conocer la propia Mar Flores publicando en sus redes sociales un escueto comunicado en el que explica la decisión que ambos han tomado y pide que se respete su privacidad y la de su familia.
"Tras más de 18 años de relación Doña Mar Flores y D. Javier Merino han decidido de mutuo acuerdo, suspender de forma temporal su convivencia. Padres de cuatro hijos, ambos piden a los medios que respeten su privacidad y no les sometan a un acoso y seguimiento mediático que puede resultar perjudicial para los niños", reza el texto que la modelo ha colgado en su cuenta personal de Instagram.
Precisamente esta semana, la modelo se iba de viaje con dos de sus hijos, Mauro y Beltrán, de 12 y 10 años. Los tres hicieron una escapada a París y estuvieron disfrutando de las instalaciones del parque Disneyland París. Una forma de relajar la tensión vivida por la familia tras el juicio a Javier Merino, que fue acusado de dejar de tributar en los años 2000 y 2001 cantidades en concepto de IRPF y en febrero fue absuelto de los dos delitos fiscales a los que se enfrentaba. Pero también, quizá, una vía de escape para huir del seguimiento medático que generaría esta noticia.
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Mar Flores y Javier Merino se casaron en el año 2001, cuando ya llevaban más de dos años de relación. La pareja celebró su boda en el cortijo Torre de la Reina, en la localidad sevillana de Guillena el 25 de octubre de 2001. Fruto de su matrimonio han nacido cuatro niños: Beltrán, Mauro y los mellizos Bruno y Darío. Ella, además, es madre de Carlo, hijo de Mar y su exmarido, el aristócrata italiano Carlo Constanzia,