Cada vez falta menos para que Carlos Baute y Astrid Klisans puedan ver la carita de su bebé. La pareja, que escogió ¡HOLA! para anunciar su inminente paternidad, dará la bienvenida a su primer hijo en agosto. Ser papás era su mayor deseo desde que se casaron, un deseo que pronto verán cumplido. Hasta entonces aprovechan sus ratos juntos y ese tiempo libre que, seguramente, pronto echarán en falta. Este sábado, el cantante y la bloguera de HOLA.com han disfrutado de un divertido plan para dos, una tarde de toros en la que se han codeado con otros rostros muy conocidos.
Astrid Klisans presume de barriguita en su quinto mes de embarazo
Carlos Baute y Astrid Klisans eligen ¡HOLA! para anunciar que van a ser padres
Mientras en Sevilla se celebraba el bautizo de Ana, la hija de Kiko Rivera, su hermano Cayetano se encontraba unos cuantos kilómetros más al norte, en Illescas (Toledo), donde le esperaba un importante compromiso profesional. El diestro compartía cartel en la plaza de toros con Enrique Ponce y Alberto López Simón, y salió a hombros junto a este último tras la faena.
¿Cómo se ha tomado Kiko Rivera que Francisco y Cayetano no acudan al bautizo de su hija?
Si bien no vimos a Eva González, la mujer de Cayetano, entre el público, sí que acudió uno de sus compañeros de trabajo, el cocinero Pepe Rodríguez, uno de los jueces del programa Masterchef. Pepe estuvo presente en la boda de Eva y Cayetano, celebrada el pasado 6 de noviembre, y el torero no dejó pasar la ocasión de saludar al compañero de su pareja.
Además de Carlos y Astrid, que presumió de barriguita con un jersey gris marengo, en el tendido se encontraba Jaime de Marichalar con sus hijos, Felipe y Victoria Federica, a quienes hemos visto en más de una ocasión acompañando a su padre a los festejos taurinos. El diestro Enrique Ponce se acercó para saludarlos, brindarles el toro tirar su capote, que los dos niños se lanzaron a coger.
Norma Duval, el torero Jame Ostos con María Angeles Grajal, la actriz Mónica Pont o el torero Sebastián Palomo Linares con Concha Azuara tampoco quisieron perdérselo.