La actriz estadounidense Jamie-Lynn Sigler -conocida por su participación en la serie de televisión Los Soprano donde interpreta a Meadow Soprano-, ha sido la última celebritie en abrir su corazón y confesar que sufre una enfermedad. La intérprete, de 34 años, señaló a la revista People que padece esclerosis múltiple desde hace casi quince años y en esta nueva etapa de su vida ya no deseaba "mantener este secreto".
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Jamie-Lynn Sigler fue diagnosticada cuando tenía veinte años, en la cuarta temporada de la serie Los Soprano, y aseguró que fue un "shock" y un momento "confuso". Una enfermedad que ha mantenido en secreto durante largo tiempo y que ahora ha decidido contar. "Quiero cambiar las ideas de la gente sobre lo que esta enfermedad significa", afirmó Jamie-Lynn Sigler, quien añadió que aspira a que las personas entiendan que sufrir esta enfermedad "no es el fin".
Se trata de un testimonio valiente en el que cuenta cómo le afecta la enfermedad en su día a día. "No puedo andar durante mucho rato sin descansar. No puedo correr. No puedo hacer personajes de superhéroe", bromea la actriz. "¿Escaleras? Sí, puedo subirlas pero no es de lo más fácil. Cuando ando tengo que pensar siempre en cada paso, lo cual es molesto y frustrante", añade. La actriz también admite que "las cosas son más manejables ahora" y que se requiere "una actitud luchadora" para lidiar con una enfermedad que, según sus propias palabras "puede tomar el control de tu vida". En ocasiones, cuando se encontraba en un rodaje señala que necesitaba cinco o diez minutos para sentarse y recuperarse, pero "nunca lo hacía. No quería que nadie sospechara".
La intérprete se casó recientemente con el jugador de béisbol Cutter Dykstra y tiene un hijo de dos años, afronta una nueva etapa de su vida en la que no quería "mantener este secreto" ya que la enfermedad es "parte" de lo que es ella. Asimismo, admitió que durante un tiempo no quiso asumirlo, porque no quería pensar que la enfermedad iba a ser parte de su futuro.
“Tengo un marido increíble, el mejor hijo, y espero que podamos tener más bebés y simplemente seguir divirtiéndonos”, asegura la actriz. Su marido, ha contado a People que su mujer tardó en decirle que padecía la enfermedad. “Yo sé que estaba nerviosa”, asegura. “Yo solo quería hacerle sentir que no estaba sola y que siempre iba a estar ahí”, añade. Esta dolencia no alteró en absoluto lo que siente por ella. “No me hace mirarla de otra manera”. También señala que para ella era importante hacer pública su enfermedad. "Todo el mundo a su alrededor quiso que ella lo contase, pero nadie podía empujarla", dice. "Sabía que se iba a quitar un peso de encima y se sentiría mejor. Todo el mundo está orgulloso de ella”.
Como la actriz, otros muchos rostros conocidos no han tenido reparos en compartir con sus seguidores diversas dolencias, entre ellos, Angelina Jolie, Michael Douglas, Taylor Swift o Hugh Jackman. Un testimonio con el que desean ayudar a muchas personas que se encuentran en su misma situación.