Alto y claro. Así ha hablado Ana Boyer de la relación que mantiene su madre con Mario Vargas Llosa "Si ellos se quieren casar, ¡cómo me voy a meter yo en eso! Para mí, lo importante, es que mi madre esté bien", declaró. La hija de Isabel Preysler confesó que Mario "es una persona estupenda" que hace feliz a su madre y cuida de ella. "Mientras yo vea que mi madre está feliz, que se la trata bien y que se la cuida, la apoyaré en todo", recalcó durante la celebración de la Christmas Party organizada por la firma española Caramelo y de la que ella es embajadora de excepción.
Con estas declaraciones, Ana zanja la polémica surgida en torno a la relación de su madre y el escritor, que podría acabar en boda en cuanto esté solventado el divorcio de Mario. "¿Has escuchado a mi madre decir que se quiere casar y que tiene una fecha establecida?", preguntó Ana a una periodista. "Pues claro que no, si es que no se sabe cuando pasará eso", respondió.
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De momento, Isabel y Mario tienen previsto irse a vivir juntos. El escritor se trasladará a la casa de de su novia, un gran paso... a la espera de la boda. En casa de Isabel podrían celebrar sus primeras navidades como pareja, unas fechas muy señaladas que compaginarán también con sus respectivas familias. "Todavía no sabemos los planes, cuando concretemos un poco más, estaremos todos juntos, seguro", afirmó Ana.
Este 2015 ha sido un año lleno de cambios para Ana, algunos tan buenos como irse a vivir con Fernando Verdasco. La revista ¡HOLA! publicó en exclusiva que la pareja había alquilado un precioso ático en Madrid para comenzar una nueva vida en común. Esta decisión generó numerosos comentarios. De hecho, se llegó a decir que Ana se iba corriendo de casa de su madre por la relación que mantenía con el nobel. "Esos comentarios son inevitables. Cada vez que pasa algo, la gente especula. Para nada, Fernando y yo nos íbamos a ir a vivir juntos en algún momento y ha pasado ahora", aclaró. ¿Pasarán allí las navidades? "La casa está en proceso. Todavía falta mucho, faltan muebles, falta todo. Para celebrar la Navidad seguro que no", confesó.
Ana está impaciente por irse a vivir con Fernando, quien sigue enseñándola a jugar al tenis. "Lo intenta, jugamos de vez en cuando y voy mejorando pero poco a poco, tiene mucha paciencia", comentó. Además, manifestó que es ella la que se está encargando de la decoración de su nuevo hogar: "La verdad es que decorar una casa da bastante más trabajo del que pensaba, me he dado cuenta de lo lento que es. De repente quieres un sofá y tarda muchísimo".
La pareja acaba de celebrar su segundo aniversario y ha decidido dar un paso más en su relación. Sin embargo, aún no piensan en boda. "No está en mis planes", dijo. Eso sí, reconoce que tener a Fernando a su lado ha sido un gran apoyo para superar la muerte de su padre, Miguel Boyer. "He tenido a Fernando a mi lado, que me ha estado apoyando en todo momento y que para mí ha sido un apoyo absoluto", explicó.