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La alfombra roja se desplegó este miércoles en Nueva York para acoger el gran evento social de la temporada: la inauguración de la tienda insignia de Porcelanosa en la Quinta Avenida de Nueva York. Una espectacular fiesta que ha significado la puesta de largo como pareja de Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa y de la que la que la revista HOLA les ofrecerá todos los detalles la próxima semana.
La aparición de la pareja, que llegó de la mano y se mostró muy cómplice durante toda la celebración, era la más esperada. Isabel, que para la ocasión llevaba el pelo recogido, deslumbró con un vestido – creación de Alfredo Villalba- cuajado de swarovskis cosidos artesanalmente. Un sensacional diseño en plata y negro brillante con aplicaciones de guipur estampado y espalda de encaje, combinado con joyas de Rabat. A su llegada, fueron recibidos por el presidente de Porcelanosa, Manuel Colonques y mantuvieron una animada charla con Richard Gere, otro de los invitados estrella al evento.
Entre las personalidades españolas que se desplazaron a Nueva York se pudo ver a Alfonso Diez, que con su presencia cumplía el sueño de la duquesa de Alba de acompañar a la familia Colonques en este día tan especial. También asistieron el exministro José Bono; la modelo Nieves Álvarez, que fue de las primeras en llegar y que acudió a la cita junto a su gran amiga, Nuria González; Finito de Córdoba y Arantxa del Sol y Cayetano Rivera, que en esta ocasión fue solo, ya que su prometida Eva González no pudo estar con él. James Costos, embajador de EE UU en España; Chelsea Clinton y su marido; Irina Shayk, espectacular con un traje de chaqueta de la firma Versace y Sarah Jessica Parker, que a su entrada se fundió en un cariñoso abrazo con su amigo Richard Gere, fueron otros de los invitados al exclusivo evento.
Tras visitar las nuevas instalaciones, Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa recorrieron del brazo los escasos 150 metros que separan la tienda recién inaugurada del Madison Square Park de Manhattan donde tuvo lugar la cena bajo unas carpas de grandes dimensiones. Los 750 asistentes - aristócratas, actores, modelos, representantes del mundo de la cultura y las finanzas- de ochenta nacionalidades distintas disfrutaron de una velada única distribuidos en mesas con una cuidada decoración, llevaban nombres de calles y estaban adornadas con flores blancas. Y como no podía ser de otra forma, el cóctel tuvo sabor español - no faltó el jamón ibérico-, seguido de un exquisito menú a base de sopa fría de tomate; langosta y ensalada de mango; "filet mignon" y de postre, tarta de chocolate agridulce y tarta de queso al estilo de Nueva York. La velada contó con música jazz en directo y la actuación del grupo Porvenir.
La periodista estadounidense Meredith Vieira pronunció unas palabras de agradecimiento para las familias Colonques y Soriano mientras que el actor Richard Gere, que también habló ante los invitados, bromeó diciendo que esto es "United Nations" de cerámica. Después de ellos se produciría el discurso de Isabel Preysler, que llegó al escenario acompañada por Mario Vargas Llosa. La gran embajadora de la firma española desde hace 30 años recordó la historia de Porcelanosa. Por su parte, la actriz Sarah Jessica Parker aseguró sentirse "extremadamente feliz" de estar presente en la fiesta. Poco después llegaría el colofón de la noche, primero con el alumbrado sorpresa del edificio ante el sonoro aplauso de los presentes y después con las palabras del nobel de Literatura.
Los invitados pudieron conocer la nueva tienda, que cuenta con 2.000 metros cuadrados distribuidos en 6 plantas y cuya rehabilitación ha sido dirigida por el estudio de Norman Foster - premio Pritzker en 1999 y Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 2009- antes de que comenzara la celabración. Sin duda, una fiesta inolvidable con momentos mágicos e irrepetibles que podrán ver en el reportaje que la revista HOLA les ofrecerá en su número de la próxima semana.
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