Mismo lugar, misma familia, pero con un extra de felicidad. Ya ha pasado un año desde que la baronesa Thyssen y su hijo Borja se reconciliaran, y qué mejor forma que celebrarlo que haciendo las maletas y poniendo rumbo a uno de sus destinos favoritos, Ibiza, para disfrutar de unos días de relax en familia.
Carmen Cervera ya llevaba varios días en la isla Pitiusa, donde aterrizó acompañada de sus dos hijas, Carmen y Sabina, con las que la vimos muy sonriente y presumiendo de looks ibicencos, perfectos para una jornada playera. Ahora, Borja se ha unido a ellas, junto a su mujer, Blanca Cuesta, y sus hijos.
- La baronesa Thyssen ya está de vacaciones con sus hijas, ¿se reunirán con ellas Borja y Blanca?
- Los Thyssen, una familia unida y feliz en el bautizo de la pequeña Kala
Felices y muy unidos, les vimos llegando hasta donde se encontraba atracado el barco al que se subieron para disfrutar de un día en alta mar, en el que aprovecharon para descansar, tomar el sol y recargar pilas. Aunque en esta ocasión no vimos a las dos hijas pequeñas de la Baronesa, sí que les acompañó el padre de Borja, Manolo Segura.
Y es que no podía faltar en este día tan especial, ya que se trataba de una celebración por partida doble: la celebración del primer 'aniversario' de su reconciliación y el 35º cumpleaños de Borja, que estaba feliz de poder ver a toda la familia reunida.
Después, pudimos ver a Borja y a Blanca disfrutando de sus vacaciones con dos de sus cuatro hijos, y también un grupo de amigos, con los que aprovecharon para salir a navegar en su barco. Baños en al mar, divertidos juegos en el agua, tomando el sol en la cubierta de la embarcación, conversaciones y muchas risas... Se lo pasaron en grande y fue entonces cuando pudimos ver lo bien que se ha recuperado Blanca del embarazo.
Después de dar a luz a la pequeña Kala el pasado mes de diciembre, ha llegado al verano en perfecta forma física, presumiendo de 'tipazo' y sin rastro de sus cuatro embarazos. Para esta jornada, vimos a Blanca con varios biquinis, en los que predominaban los colores llamativos y las combinaciones de estampados.
Además, la cuñada de la baronesa Thyssen se resguardó del sol con un sombrero de paja y unas gafas de sol azules tipo espejo, que están tan de moda esta temporada, y que llevaba a juego con su marido. Una vez que se bajaron del barco y pusieron pie en tierra, se cambió de ropa y sustituyó la camiseta de tirantes y el short amarillos por un vestido blanco vaporoso de inspiración ibicenca.
Como dos enamorados, y pensando que estaban lejos de miradas 'indiscretas', demostraron que su amor sigue tan vivo como el primer día. Abrazados y dándose un romántico beso, Borja y Blanca volvieron a dejar patente que su matrimonio está pasando por uno de sus mejores momentos y está felices y muy orgullosos de la familia que han formado junto a sus cuatro hijos, Sacha, Eric, Enzo y la pequeña Kala.