“Mirar hacia adelante y estar atenta al prójimo”. Con estas palabras, Marta Marzotto explicaba a la revista ¡HOLA! en donde reside el secreto de su vitalidad, mientras nos abría las puertas de su impresionante refugio en Punta del Este. Después de cumplir los 84 años, el pasado mes de febrero, la abuela materna de Beatrice Borromeo es toda una celebridad en el mundo de la cultura, la moda, el arte y la sociedad internacional.
Ya sea durante el Festival de Venecia, el de Cannes, en una importante gala benéfica u ocupando el front row de los desfiles de moda más destacados de París o Milán, la condesa Marta Marzotto es inconfundible. Acompañada por un abanico en verano o por un gorro de piel en invierno, esta dama se envuelve en una gran sonrisa, túnicas de telas vaporosas y coloridas, zapatos planos y vistosas joyas, todo ello combinado con un estilo muy italiano.
Aunque ahora es su nieta, Beatrice –fruto de la relación de su hija mayor, Paola, con el conde italiano Carlo Borromeo- la que ocupa todas las portadas debido a su próxima boda con Pierre Casiraghi, Marta continúa acaparando muchos flashes. La Condesa es dueña de una belleza y elegancia que la futura nuera de la princesa Carolina de Mónaco ha heredado, igual que otros rasgos en común.
Con quince años, Marta comenzó a trabajar como modelo -profesión que también desempeñó Beatrice- así fue como conoció al conde Umberto Marzotto, descendiente de uno de los imperios textiles más importantes de Italia, el grupo Marzotto. Después de dos años de noviazgo, se casaron en el año 1954 y tuvieron cinco hijos: Paola –madre de Beatrice y Carlo Borromeo-, Annalisa, Vittorio, Diamante y Matteo.
La casa textil Marzotto fue creada en 1836 como una empresa familiar. De los 12 operarios con los que nació pasó a tener 3.500 en 1931. Al bisabuelo de Beatrice, Gaetano Marzotto (1894- 1972), le fue otorgado el título de conde por su labor social con sus trabajadores y sus familias, hasta el punto de construir casas para que los niños de sus empleados pudieran ir a la playa. A su funeral fueron 10.000 obreros de su fábrica. El Grupo Marzotto, entonces dueño de Hugo Boss y fabricante para Gianfranco Ferre, Marlboro Classics y Missoni, adquirió Valentino en 2002, vendiéndolo cinco años después
A la faceta de madraza italiana, a Marta Marzotto se le suma una apasionante vida profesional. La condesa ha sido diseñadora, ha escrito dos libros, es experta en arte e incluso llegó a ser musa del pintor italiano Renato Guttuso, su estilo decorativo es alabado y su filosofía para ello es: “La visión de las cosas bellas conduce a la belleza”.
La Condesa se define como una "trotamundos" y si con su hija mayor –Paola, la madre de Beatrice- comparte su pasión por viajar (ambas han hecho su refugio en unas preciosas mansiones en Uruguay y atesoran impresionantes propiedades desde Italia hasta Marruecos, pasando por Saint Tropez), con su hijo pequeño, Mateo, la condesa mantiene un vínculo muy especial.
Matteo Marzotto –que durante un tiempo estuvo saliendo con la modelo Naomi Campbell y es actual presidente de la Feria de Vicenza- ha sido una de las caras más visibles del grupo familiar, ya que durante un tiempo fue el presidente de Valentino. El pequeño de la casa ha sido durante mucho tiempo uno de los compañeros favoritos de su madre para acudir a desfiles, eventos sociales y galas benéficas.
La italiana disfruta enormemente de su vida familiar, de sus hijos, nietos y bisnietos, como Beatrice y Carlo Borromeo, o el hijo de este, Cris, fruto de su matrimonio con Marta Ferri y que nació a principios de año. Ellos sacan de Marta Marzotto el espíritu más joven y divertido, así como su eterna sonrisa.
Si algo caracteriza a sus apariciones es que la condesa Marzotto disfruta la vida al máximo, siempre está feliz y no tiene inconveniente en mostrar en público como efusividad el cariño que siente por su familia y amigos. Entre otras personalidades, la Condesa se deja ver con Naty Abascal, Roberto Cavalli, Ferruccio Ferragamo o Lapo Elkann, ya sea en eventos de moda o con fines solidarios.
El pasado 24 de abril Marta Marzotto y el tío de Pierre Casiraghi, Alberto II, disfrutaron juntos de una velada en el Casino de Venecia, dando muestras de que la familia de Beatrice Borromeo está de lo más integrada en la familia Grimaldi, cosa que ya se puso de manifiesto en el último Baile de la Rosa. El Príncipe se encontraba en en la ciudad de los canales para dar un conferencia científica, junto a otros expertos, sobre los glaciares de los Alpes, tras lo cual se celebró una cena de gala en beneficio de la fundación.
“Si te gusta el minimalismo, ella no es tu mujer”, le dijo Matteo a los periodistas de The Wall Street Journal cuando hace dos años viajaron hasta Marrakech para descubrir el riad de su madre. Viendo su pasión por la vida y los suyos es probable que Marta Marzotto -piedra angular de la familia- sea una de las que más disfrute en la próxima boda de su nieta, ya que con ella llega la alegría.
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