En el jardín de su fabulosa mansión de Los Ángeles en medio de un circulo creado por pétalos de flores blancas y con la presencia de familiares y amigos cercanos, todos ellos vestidos de blanco. Así se han dado el sí quiero la hermana pequeña de Marie Chantal de Grecia, Alexandra Von Furstenberg y el arquitecto Dax Miller. Una boda que tuvo lugar el 7 julio, justo cuando cumplían sus siete años de amor.
Vestida con un diseño de su amiga Monique Lhuillier, esta también diseñadora -que llegó a ser la directora creativa y de imagen de Diane von Furstenberg- apareció en el jardín de su casa acompañada por sus dos perros Pomeranian. En el improvisado altar delante de la piscina -creado con un círculo y algunas guirnaldas e flores a juego con el ramo de la le espera Dax y con una sencilla ceremonia de intercambio de anillos se proclamaron como el matrimonio Miller.
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Curiosamente este romántico enlace bajo el sol californiano devuelve a la novia su apellido de soltera. Alexandra, hija del magnate estadounidense Robert Warren Miller, fue Alexandra Miller hasta que el año 1998 se casó con el príncipe Alexander Von Furstenberg, hijo de Diane von Furstenberg. Apellido que ha conservado hasta ahora que se ha vuelto a convertir en Alexandra Miller.
No podían faltar los hijos de Alexandra, fruto de su matrimonio con el Príncipe, Talita –que a sus 16 años es toda una it-girl y una firme candidata a hacerse con el timón de la firma que creada por su abuela, DVF- y Tassilo von Furstenberg. Además también voló desde Londres, Marie Chantal para ver el segundo enlace de su hermana pequeña.
No extraña que hayan elegido su casa para el gran día y es que se trata de una mansión diseñada por el novio a gusto de la novia. Una mansión que ha salido en diversas revistas de arquitectura y de decoración, con forma de "H", líneas rectas y en la que el blanco y el negro solo se ve interrumpido por el verde el jardín y el azul de la piscina.
El arquitecto nacido en Los Ángeles supo hacer realidad el sueño de Alexandra e incluso incluyó en el diseño referencias a su infancia como carteles del “Duty Free” del Aeropuerto de Hong Kong, donde ella pasó buena parte de su infancia ya que su padre fue uno de los fundadores del imperio de las tiendas libres de impuestos. Así que en su hogar fue también en donde se celebró el coctel de boda, en la que también se eligió el color blanco.
La familia Miller está de enhorabuena en lo que al corazón se refiere, puesto que este enlace se ha celebrado días después de que su hermana haya cumplido sus veinte años de matrimonio con Pablo de Grecia. Un amor que suma al que que festejó toda la familia el pasado mes de mayo en el lago Como: las bodas de oro de Robert Warren Miller y su esposa Chantal, padres de Marie Chantal, Alexandra y Pia.
Las celebraciones comenzaron con un viaje inolvidable en el Orient Express, que tomaron en París el viernes 8 de mayo, y en cuyos evocadores vagones tuvo lugar una fiesta ambientada en los años veinte. Tras finalizar el trayecto, en Chiasso, se trasladaron al lago Como, donde, al caer la tarde, los Miller volvieron a jurarse amor eterno en el transcurso de una magnífica velada en Villa Pizzo.
Un derroche de lujo y diversión al que no faltaron sus consuegros los reyes Constantino y Ana María de Grecia, el príncipe Nicolás y su esposa, Tatiana, los príncipes Michael de Kent, entre una larga lista de familiares y amigos que vistieron sus mejores galas para una celebración que se vive solo una vez en la vida.