Su voz la escuchan millones de personas en todo el mundo y su estilo es imitado al milímetro. Es un ídolo, una estrella de la música, pero su poder va más allá que todo eso. Tiene 25 años pero Taylor Swift es una de las artistas actuales que más peso tienen en la industria, tanto que una de las empresas con más poder ha rectificado con sólo uno de sus pestañeos.
Apple anunció que no pagaría derechos musicales durante los tres meses iniciales de su nuevo servicio de música en streaming, que está previsto que vea la luz el 30 de junio. En una carta colgada en sus redes sociales, Taylor calificó esta decisión de “sorprendente, decepcionante” y completamente diferente a la línea progresiva que había mantenido la empresa históricamente (ella no va a poner su disco 1989 a disposición de la plataforma). “No os pedimos iPhones gratis. Por favor, no nos pidáis que os demos nuestra música sin compensación” escribió Taylor. Estas palabras, junto al hecho de que Taylor estaría hablando con otros compañeros, alcanzaron un gran apoyo en las redes por parte de compañeros de profesión.
No ha pasado más que un día hasta que se ha demostrado el poder que tiene la joven artista. Un día después de que esta carta viera la luz, la empresa ha dado marcha atrás rectificando su idea inicial y anunciando que pagará un porcentaje de royalties a los artistas. “Le hice saber que escuchamos sus quejas y haremos el cambio” comentó Mr. Cue, ejecutivo encargado de iTunes y de la nueva plataforma, tras haber hablado con Taylor. Es la mejor muestra de por qué es una de las 100 mujeres más poderosas del mundo, ¿no?