Una saga literaria convertida en una serie cuyo éxito ha llegado hasta todos los rincones del mundo. Juego de tronos, basada en las novelas Canción de hielo y fuego del autor George R.R. Martin, ha conseguido hacerse un hueco en las televisiones de millones de hogares. Su trama, sorprendente y llena de giros argumentales, fascina tanto como sus complejos personajes. Pero ¿de dónde sale la inspiración para una serie así?
George R. R. Martin ha dejado claro en varias ocasiones que es un apasionado de la Historia: no hay más que sumergirse en los ficticios reinos medievales de Poniente para darse cuenta de esto. De hecho, tal y como recoge Daily Mail, algunos de los personajes femeninos de la popular saga podrían estar basados en históricas mujeres reales, a juzgar por los parecidos que se encuentran entre ellas. ¿Quieres conocerlas?
Isabel I de Inglaterra y Daenerys Targeryen
Quizá la reina Isabel I de Inglaterra no tuviera las mismas habilidades sobrenaturales que Daenerys Targeryen, pero dejando a un lado las cualidades fantásticas, las vidas de la soberana y la khaleesi tienen varios puntos en común. Aunque Isabel I no fuera capaz de invocar dragones para luchar en sus causas, sí contaba con una imponente armada. Ambas, además, eran mujeres poderosas que buscaban ampliar aún más su influencia, en el caso de Daenerys para reconquistar el Trono de Hierro y en el de la reina Isabel I para aumentar las colonias inglesas.
Margarita de Anjou y Cersei Lannister
Una mujer poderosa, con carácter y con un matrimonio pactado con el fin de forjar alianzas políticas. Podríamos estar hablando de Cersei Lannister, pero también de Margarita de Anjou. El personaje al que da vida Lena Headey se casa en la ficción con Robert Baratheon convirtiéndose en reina consorte de los Siete Reinos, mientras que Margarita de Anjou también llegó a ser reina de Inglaterra casándose con Enrique VI. Las dos tienen en común, además, los espinosos asuntos relacinados con la legitimidad de sus hijos, cuyas inclinaciones bélicas son también un punto en el que coinciden. Y tanto las vida de Joffrey Baratheon, hijo de Cersei, como la de Eduardo de Westminster, hijo de Margarita, terminaron de forma brusca y violenta, envenenado en su propia boda y en caído en combate, respectivamente.
Ana Bolena y Talisa Stark
Un romance que comienza con un rey dando la espalda a su matrimonio en favor del amor verdadero y finaliza con un acontecimiento trágico. Así es la historia ficticia de Robb Stark, que decidió quedarse con Talisa en lugar de casarse con una de las hijas de Walder Frey, como estaba planeado. Su historia de amor no tiene un final feliz, pues deriva en la muerte de ambos durante la masacre de la Boda Roja. Ana Bolena también fue objeto del amor de Enrique VIII, quien estaba casado con Catalina de Aragón y terminó poniendo fin a su matrimonio con ella para casarse con Ana Bolena.
María I de Inglaterra y Melisandre
El empleo del fuego como medio para acabar con sus enemigos religiosos es en este caso el principal nexo común entre la sacerdotisa roja y María I de Inglaterra, que recibió el apodo de 'María la Sanguinaria' por no dudar en mandar a la hoguera a aquellos que disentían de la religión establecida en Inglaterra.
Brienne de Tarth y Juana de Arco
Su carácter guerrero y luchador, así como la lealtad hacia sus respectivas causas son algunas de las similitudes entre estos dos personajes. También la serie de infortunios que marcan sus trayectorias. Tanto Juana de Arco como Brienne de Tarth tuvieron que emplear ropas masculinas, e incluso el sobrenombre con el que las dos son conocidas es casi idéntico: Brienne, la Doncella de Tarth, y Juana, la Doncella de Orleans.