Ella periodista y él deportista. La fórmula parece que funciona y a las parejas ya conocidas (Sara Carbonero-Iker Casillas, Melissa Jiménez-Marc Bartra y Lara Álvarez-Fernando Alonso) tenemos que sumar una nueva, la formada por Irene Junquera, el rostro de El Chiringuito de Jugones y Zapeando, y Cristian Toro, la gran promesa del piragüismo español. La pareja mantiene una bonita historia de amor desde hace más de dos años, tal y como reflejan las imágenes que comparten en sus respectivas redes sociales.
Irene, periodista deportiva de profesión, ha dado el salto a la sobremesa de laSexta, donde ha mostrado su cara más divertida. Esta madrileña, de 30 años, llegó al plató de Zapeando el 20 de abril para sustituir a Cristina Pedroche durante su aventura en Pekín Express. Irene fue muy bien recibida por sus compañeros y también por la audiencia, ya que aún continúa formando parte del programa.
Y cuando no trabaja,se convierte en el mejor talismán de su chico, del que se siente muy orgullosa. El pasado mes de mayo la periodista fue testigo de la victoria de la selección española de piragüismo en la I Copa del Mundo de Canoe Sprint Portugal 2015, un nuevo triunfo para Cristian que le acerca a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. "Quiero estar allí y vivir la mejor experiencia que cualquier deportista podría desear, no es fácil pero con esfuerzo, constancia y preparación, estoy seguro de poder llegar", asegura el deportista en su página web.
Cristian, a quien mucho aún recuerdan por su paso por Mujeres, hombres y viceversa, vive del gracias a la beca ADO del Consejo Superior de Deportes. "Cuando estás en la élite recibes unas becas y unas ayudas que te permiten vivir del piragüismo en ese momento pero no puedes labrarte un futuro", reconoció a Marca en una entrevista. "En este país no se reconocen los deportes minoritarios porque no los venden tanto como otros", añadió.
El deportista quiere seguir los pasos del piragüista olímpico Saúl Craviotto, oro en Pekín 2008 y plata en Londres 2012. Lo que no sabemos es si pedirá matrimonio a Irene al conseguir tantas medallas, como hizo Craviotto en su día con su novia. "Aproveché ese momento porque era muy especial. Fue en Picadilly Circus. Íbamos andando, paré para sacar el anillo y se lo pedí", detalló Craviotto. Un año después de Londres 2012 llegó la boda, a la que asistieron Cristian e Irene, y hace unos meses se conviertieron en padres por primera vez de una niña.
¿Cambiarán los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 la vida de Irene y Cristian? ¡La cuenta atrás para saberlo ha comenzado!