Seis años están a punto de cumplirse desde la muerte del cantante Michael Jackson. El rey del pop fallecía el 25 de junio de 2009 en Los Ángeles a los 50 años, dejando tras de sí una leyenda de la música y tres hijos, Prince, Paris y 'Blanket', que por entonces contaban con 12, 11 y 7 años, respectivamente. Ha pasado el tiempo y ya no son unos niños: han crecido y comienzan a vivir importantes experiencias en sus vidas en las que no han podido contar con la presencia de su padre.
Prince Jackson, el mayor de los hijos del artista, celebraba este viernes un gran acontecimiento para él: su graduación. Al igual que el resto de sus compañeros de la Escuela Secundaria Buckley en Sherman Oaks, California, Prince se vistió con una toga negra, birrete, banda roja y su diploma de graduación, elementos imprescindibles para un acto que es todo un símbolo del paso a la edad adulta.
No pudo estar acompañado por su padre, que sin duda sí estuvo presente en su memoria. En su lugar, su familia acudió para arroparle en este día tan especial para él. Su tía, la cantante La Toya Jackson, se encargó de compartir con el mundo su inmenso orgullo, así como algunas fotos de la ceremonia. "Muy orgullosa de ti, Prince, ¡lo conseguiste! Y lo hiciste con honores", escribió en su cuenta de Twitter. TJ Jackson, primo de Prince, también tuvo algunas bonitas palabras para él en las redes sociales: "Prince, te has convertido en un joven increiblemente especial. No puedo expresar lo orgulloso que estoy".
Parece que poco a poco los hijos de Michael Jackson van haciendo sus vidas tras el durísimo golpe que supuso el fallecimiento de su padre. No sólo Prince. A su hermana Paris le costó especialmente superar la pérdida de Michael Jackson así como todos los acontecimientos que siguieron a su muerte. Las circunstancias superaron a Paris, que en 2013 tuvo que comenzar un tratamiento para combatir su depresión. Durante mucho tiempo se ha mantenido apartada de la escena pública, pero precisamente esta semana reaparecía en un evento de alfombra roja. Muy recuperada y marcando estilo, Paris posó junto a su chico, Chester Castellaw, quien sin duda ha contribuido a que la hija del rey del pop recupere su sonrisa.
Mientras tanto el rancho del cantante, Neverland, busca un nuevo dueño. La propiedad que fue hogar del artista durante 17 años se ha puesto a la venta por 100 millones de dólares, el precio que le han puesto al reino de los sueños de Michael Jackson.