Una imagen vale más que mil palabras y, a veces, una mirada también. Después de diez años de amor, para Rafa Nadal y su chica, María Francisca Perelló, no es necesario hablar para entenderse, y eso es algo que ha sido más que evidente durante su última aparición.
La Fundación Rafa Nadal ha celebrado este sábado en París su primera gala internacional, un evento benéfico que ha contado con el apoyo de numerosas personalidades que acompañaron al tenista español, y María Francisca no podía faltar. Radiante con un vestido largo de color fucsia con escote palabra de honor, un pequeño 'clutch' metalizado, la melena peinada en un recogido deshecho y maquillaje sencillo, María Francisca derrochó complicidad con Rafa intercambiando con él algunas románticas miradas que no pasaron desapercibidas. También acudió la madre del tenista, Ana María Parera, presidenta de la Fundación.
Alrededor de 400 personas han participado en este evento que tuvo lugar en el Hotel Intercontinental París Le Grand y que contó con la colaboración de Ramón de Miguel, embajador español en Francia, Chris Kermode, presidente de la ATP, así como Jean Gachassin, presidente de la Federación francesa de tenis y de Roland Garros.
El objetivo de la gala fue recaudar fondos para el Centro Fundación Rafa Nadal, el primer proyecto propio de la organización con el que se ofrece educación a través de la práctica deportiva a los niños y jóvenes socialmente desfavorecidos.
Rafa fue el encargado de presentar su proyecto, cuyos beneficios se destinarán íntegramente a la financiación de un centro educativo ubicado en Palma de Mallorca, en una noche en la que contó con el apoyo de otras personalidades como los prestigiosos chefs Juan Mari y Elena Arzak, y el francés Christophe Raoux.
Una vez finalizada la cena, la cantante española Luz Casal, muy querida en Francia, ofreció una actuación que contó con la interpretación de algunos de sus temas más conocidos como Historia de un amor, Piensa en mí, Je reviens te chercher o Un año de amor.
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