Ha establecido su base de operaciones en Panamá, donde reside con sus cuatro hijos. Miguel Bosé ha recalado en España para hablar de su nueva gira de conciertos Amo Tour, que le llevará por diversas ciudades de nuestro país pero también del mundo durante los próximos meses. El intérprete explica así su decisión de vivir en el país latinoamericano. “Es una cuestión de calidad familiar, estos últimos años lo pasé fatal, veía a mis hijos poco y se me partía el corazón. He ganado en movilidad profesional y en calidad familiar, los niños acaban de cumplir cuatro años los mayores y el tiempo va que vuela y si no me los pierdo”.
Diego, Tadeo, Ivo y Telmo son los cuatro hijos del artista, que apenas se llevan siete meses de diferencia, y ya empiezan a mostrar su carácter y darse cuenta a sus cuatro años de que su padre tiene una profesión diferente. “Son dominantes y ninguno quiere ceder. El otro día cuando salió este álbum de repente en el coche lo puso el conductor y, empezaron a mirarse, esta voz es conocida, y Tadeo, que es el más espabilado de todos dijo: ‘Papá, ¡tú cantas!’ Y le dije, entre otras cosas hijo mío”.
Con una mirada de cariño y orgullo, Miguel habló del carácter de otro de sus hijos y de los juegos que tienen entre ellos. “Ivo es temible, le preguntas qué es lo que más le gusta en el mundo y te dice pegar, él lo resuelve todo a castañas” aseguró con simpatía. El intérprete desveló uno de sus “juegos”, que es que son todos “los vengadores”. “Soy Thor, Diego es Iron Man, Tadeo es el Capitán Amércia, Telmo, Spiderman e Ivo es Hulk” explicó.
Una de las cosas que enseña a sus pequeños es a respetar el momento de las comidas. “Para mí la mesa es sagrada, todos trabajamos para comer. Una persona que no sabe estar en la mesa, no respeta la comida, y las formas de la convivencia en una comida, hay algo que está fallando”. Otra lección importante que quiere inculcarles es “mantener la diferencia entre las tres vidas que debe tener una persona, la pública, la privada y la secreta”. Pablo Motos, presentador de El Hormiguero, le preguntó si algún día les hablará a los niños de sus secretos. “A los hijos no hay que mentirles nunca, hay que saber cómo decir las cosas”.
Miguel aclaró que hay aficiones que ya no practica como el buceo entre tiburones. “Hace cuatro años que no me pongo un neopreno. Vivo con miedo, porque cuando nacen los hijos se te van los temores pero te llegan los miedos, porque dices si ahora me caigo y me pasa algo, y si me meto debajo y me pega un mordisco un tiburón y los dejo solos…” dijo antes de explicar que cuando sean más mayores les iniciará en esta práctica.