Tiene 22 años y en los genes la herencia de una de las estrellas del rock más recordadas de los años 80 y 90, cuya leyenda aumentó si cabe aún más después de su muerte. Frances Bean, hija de Kurt Cobain, líder de Nirvana, ha hablado por primera vez de lo que significa la figura de su padre, al que se considera referente y símbolo de la llamada "Generación X". En el documental Montage of Heck se hace un repaso por la vida de este cantante que fue una de esas estrellas que no superó la presión de lidiar con un éxito desmesurado y falleció demasiado pronto (en 1994 con apenas 27 años).
“Mi padre era excepcionalmente ambicioso, pero tenía muchas cosas encima, que excedían su ambición. Quería que su grupo tuviera éxito, pero no quería ser la voz de una generación” declara Frances. La joven, única hija que tuvo Kurt con Courtney Love, asegura que no es una gran fan de la música de su padre. “No me gusta mucho Nirvana, no estoy interesada en el grunge. Pero Territorial Pissings y Dumb son grandes canciones. Lloro cada vez que escucho Dumb, es una versión que revela cómo se veía a sí mismo, de sus adicciones, de sentir que no era apropiado llamarle la voz de una generación…”.
Frances asegura que no se sentía rara por no tener ese interés que mostraban los adolescentes a la música de su padre. “Me sentiría más rara si hubiera sido su fan. Tenía 15 años cuando me di cuenta de que no podía escapar de él. Incluso cuando iba en un coche y tenía la radio puesta, allí estaba mi padre. Ha llegado más allá de su muerte, nuestra cultura está obsesionada con los músicos muertos. Nos encanta ponerles en un pedestal. Si Kurt hubiera sido otro hombre que hubiera abandonado a su familia del peor modo posible… pero no lo fue. Inspiró a la gente y le pusieron en un pedestal, lo que le convirtió en “San Kurt”. Se hizo más grande incluso tras su muerte, no parecía que pudiera llegar a ser más grande, pero lo fue”.
A pesar de que ella era apenas un bebé de cerca de dos años cuando su padre falleció, reconoce en la voz que escucha en el documental un cierto tono que se asemeja al que ella tiene cuando habla. “Es una especie de tono, la profundidad es similar a la que yo tengo al hablar. No sé qué es, ni siquiera hablaba casi cuando él estaba vivo”. Asegura que en una ocasión, los antiguos miembros de Nirvana, Dave Grohl, Krist Novoselic y Pat Smear, la visitaron y vieron el parecido con su padre. “Hablaban entre ellos, recordando viejas historias que he escuchado millones de veces. Y decían: Haces lo mismo que habría hecho tu padre”.
La reconciliación pública de Courtney Love y su hija Frances tras cinco años distanciadas
La hija de Kurt Cobain, ¿comprometida a sus 19 años con una estrella del rock?
En el reciente estreno del documental de su padre, Frances posó con su madre Courtney Love, con la que ha hecho las paces tras cinco años distanciadas. La relación entre ambas no ha sido siempre fácil, dado que tras la muerte de Kurt, Courtney se tuvo que hacer cargo de su educación ella sola y además tuvo que lidiar con diversos problemas y adicciones. En 2009, cuando Frances tenía 17 decidió irse a vivir con la familia de su padre.
Kurt Cobain fue el líder de Nirvana, una banda que nació a finales de los años 80 y se convirtió en uno de los referentes del estilo grunge. Convertido en ídolo, a Cobain siempre le pareció que el mensaje de su música se había malinterpretado y estaba frustrado por ello. Luchó durante los últimos años de su vida contra una depresión y diversas adicciones hasta que falleció en 1994.
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