Kiko Rivera es un apasionado de la Semana Santa sevillana tal y como demuestra año tras año al acudir puntualmente a su cita en la capital hispalense. Un fervor y un amor por la tradición que le inculcó su familia, con su madre Isabel Pantoja a la cabeza, y que ahora él quiere transmitir a su hijo Francisco.
Aprovechando que estos días el niño se encuentra con él y que el Lunes Santo hacía muy buen tiempo, Kiko quiso llevarle a ver la procesión de San Gonzalo. El DJ, que llevaba a su hijo en brazos, se situó en las primeras filas para que el pequeño no se perdiera ningún detalle del misterio de esta hermandad. Su prima Anabel Pantoja presenció junto a ellos el paso, uno de los cortejos más largos de la jornada pero que no quisieron perderse como buenos trianeros que son. La joven, una de las personas más cercanas al hijo de Isabel Pantoja en estos momentos, se mostró muy cariñosa con Francisco, quien durante algún tiempo mantuvo apoyada la cabeza en el hombro su padre.
Irene Rosales, novia de Kiko, también estuvo viendo la procesión, igual que hizo el Domingo de Ramos cuando se la pudo fotografiar junto al hijo de Isabel Pantoja presenciando otro de los tradicionales pasos sevillanos. Ésta Semana Santa está siendo muy diferente para los Pantoja, con Isabel en la cárcel no podrá repetirse la imagen de madre e hijo contemplando desde un balcón la comitiva de las cofradías como ha ocurrido en otras ocasiones.