José Ortega Cano ha pasado estas fiestas, sin duda las más difíciles para él, en la cárcel de Zuera, en Zaragoza, en la que ingresó el pasado mes de abril. No pudo salir de prisión durante las fiestas más importantes (no se le concedió el permiso), aunque ahora los Reyes Magos le han traído un gran regalo por adelantado: el esperado permiso de seis días durante los que permanecerá fuera del centro y disfrutará de los suyos. El programa Espejo Público fue el que adelantó la noticia y el que emitió las imágenes de este esperado momento, en el que el exdiestro salía del centro penitenciario.
En torno a las once de la mañana, José Ortega Cano abandonaba la prisión acompañado por su pareja Ana María Aldón que acudía a primera hora a buscarle con una amplia sonrisa en el rostro y sin querer hacer demasiados comentarios. La felicidad se le notaba en el rostro. El exdiestro caminó hacia el coche, visiblemente más delgado, con barba y una cazadora de cuadros, y lo primero que hizo cuando llegó al vehículo fue saludar a su hijo José María, de casi dos años de edad (los cumple en febrero). Ahora se reunirá seguramente con el resto de la familia, aunque no se sabe aún dónde será el encuentro si en Zaragoza o en otro lugar (parece que puede salir de Zaragoza y trasladarse a otra ciudad). Queda ahora por saber cuándo se le concederá el tercer grado penitenciario, con el que seguirá cumpliendo su condena en un régimen de semilibertad (ha cumplido ya una cuarta parte de la misma).
Horas antes Ana María había acudido también a visitarle, acompañada por su cuñado Paco, y había dicho que aún no sabía cuándo le dejarían salir.“De momento, a día de hoy, no sabemos nada, ojalá supiéramos, pero es que no sabemos nada” dijo. Ana María añadió que estas fiestas lo había llevado de la mejor manera posible. “No sabemos hasta cuándo tiene que estar y lo llevamos lo mejor que podemos” aclaró. También contó que José Ortega Cano, que en el mes de noviembre tuvo que ser ingresado en el hospital aquejado de una neumonía (fue entonces la única ocasión en la que salió del centro), se encuentra “bien” de salud.
José Ortega Cano sale de la cárcel para ser ingresado en un hospital de Zaragoza
Así es la vida en Zuera, la prisión donde José Ortega Cano cumple condena
Ortega Cano recibe por primera vez la visita en prisión de su hijo pequeño, José María
En Nochebuena, el exdiestro estuvo con su pareja Ana María Aldón y sus hijos José Fernando, Gloria y el pequeño José María, que acudieron a verle y seguramente le animaron en estos momentos complicados. Ana María dijo que estos días había visto a José Fernando, que ha seguido un tratamiento en la clínica López Ibor durante los últimos meses, “bastante bien".
El 'regalo' más especial de Ortega Cano por Navidad
Estas han sido sin duda las Navidades más complicadas para los Ortega Cano que han tenido que celebrar sin él unas fiestas en las que la familia es lo más importante. "A uno de los grandes, al que siempre está para mis alegrías y mis penas, al que da todo por todos, el que tiene un corazón que no le cabe ni en el pecho, que siempre tiene una sonrisa para la vida, y que a día de hoy ha demostrado mucho más que nadie que es acero para los barcos, y que nada ni nadie le va a hundir, a esa personita que es mi icono y mi ejemplo a seguir, a esa persona que tanto amo, y admiro, desearle feliz cumpleaños ❤️❤️ -eterno-", fueron las emotivas y cariñosas palabras que dedicó Gloria a su padre en las redes sociales.
José Ortega Cano ingresó en la prisión zaragozana de Zuera el pasado 24 de abril para cumplir la condena de dos años y seis meses que se le impuso por el accidente de tráfico en el que perdió la vida Carlos Parra. Fue en abril de 2013, cuando José Ortega Cano conoció la sentencia por el accidente mortal en el que se vio involucrado el 28 de mayo de 2011 y en el que falleció un vecino de Castilblanco de los Arroyos, en el que presuntamente el torero conducía con un nivel de alcoholemia que triplicaba la cantidad permitida. Fue condenado a dos años y seis meses de cárcel por homicidio imprudente y conducción temeraria, a pagar una indemnización de 158.000 euros a la familia del fallecido y la retirada del carnet de conducir durante un periodo de tres años.
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Durante este tiempo en que ha permanecido en prisión, ha tenido que seguir desde la distancia la recuperación de su hijo José Fernando que está ingresado en la clínica López Ibor, de Madrid, ciudad en la que reside su hija Gloria, que ha afrontado esta complicada situación con mucha entereza.
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"Somos una familia normal y yo intento estar con mi padre y mi hermano en lo bueno y en lo malo. Nos apoyamos en todo", declaró la joven la pasada primavera. Gloria ha encontrado en Ana María Aldón, la pareja de su padre, y en sus tíos, los hermanos de Ortega Cano, un gran apoyo. Juntos han acudido a visitar al extorero en prisión siempre que han podido, unas visitas en las que faltó José Fernando, que acudió por primera vez a la prisión en la pasada Nochebuena. Ahora será el momento en que reúnan de nuevo, pero esta vez en casa. Un comienzo de año muy feliz para la familia del torero.