Paralizada. Así se ha quedado Chicago tras el paso de la supertormenta de lluvia y nieve que azota el centro y noreste de Estados Unidos, y que ha afectado a más de 100 millones de personas. La conocida como 'Ciudad del Viento' ha sido donde la "tormenta monstruosa", "una de las peores" de la temporada invernal según los meteorólogos, ha golpeado con mayor intensidad, con vientos polares de hasta 80 kilómetros por hora y capas de nieve de 60 centímetros de espesor. Mientras las autoridades intentan paliar las consecuencias de la tercera tormenta más intensa en la historia de la ciudad, las clases en las escuelas públicas se han suspendido por primera vez en 11 años y los aeropuertos han sido cerrados.
Un peatón camina a la orilla del lago Michigan el miércoles 2 de febrero en Chicago
Un empleado de los Servicios de Limpieza de Chicago quita la nieve de una plataforma de tren
Un ciudadano de Chicago camina por el centro de Madison Street después de la tormenta de nieve
Una excavadora quita la nieve alrededor de los coches que se quedaron varados en Lake Shore Drive
Eileen Negro toma imágenes en el interior de un autobús de la ciudad que se quedó paralizado durante la noche
Los residentes de Park Ridge, en Illinois, limpian la nieve que cayó delante de su casa
Un hombre esquía en la calle de Glenview, donde se acumularon más de 20 centímetros de nieve
Cientos de coches quedaron atrapados en Lake Shore Drive tras el paso de la supertormenta
David Gonzali aparta la nieve de su coche, que quedó sepultado tras la impresionante tempestad
La nieve se acumula en el interior de una camioneta que se quedó abierta en Lake Shore Drive
