Las calles de Miami Beach y, en particular, de Ocean Drive, se convirtieron hace unos días en un improvisado plató con una estrella de excepción, Jennifer López, considerada actualmente la artista más atractiva y sexy del mundo.

La popular actriz y cantante de origen puertorriqueño, que atraviesa por uno de los mejores momentos de su vida profesional (cobra cerca de dos mil millones de pesetas por película), posaba como modelo de ropa juvenil. A su llegada la zona quedo totalmente colapsada por el numeroso público que se congregó para poder ver de cerca de una de sus estrellas favoritas.

Jennifer posó para el prestigioso fotógrafo de moda, Gilles Bensimon, ex marido de la famosa modelo, Elle McPherson, y lució las últimas creaciones de su propia línea de ropa. Esta nueva faceta de su vida profesional puede proporcionarle, según se ha dicho cerca de 15.000 millones de pesetas.

Después de una dura mañana de trabajo, Jennifer López se tomó un descanso junto a su marido, Chris Judd. El bailarín y coreógrafo, que no se separa de ella en ningún momento, estuvo junto a Jennifer durante la sesión fotográfica y captó con una cámara de vídeo todas sus poses.