Adriana Abascal con su hija Paulina, su marido Juan Villalonga no se encontraba en Los Ángeles, donde residen, por motivos profesionales

La playa de Santa Mónica fue el marco idóneo para que madre e hija disfrutaran de una divertida tarde de juegos

 

La revista ¡HOLA! de esta semana les ofrece una amplia entrevista con Adriana Abascal, la bella esposa de Juan Villalonga. La joven mexicana pasó una tarde en la playa de Santa Mónica con su hija y, allí, habló de su vida en Estados Unidos, de su unión con el prestigioso empresario español, de sus futuros planes profesionales y, como no, de la pequeña Paulina Villalonga.

La pareja contrajo matrimonio el pasado 30 de junio en una íntima ceremonia celebrada en su mansión de Los Ángeles, donde viven habitualmente aunque también poseen una residencia en Miami y otra en California. Adriana asegura que, de momento, continuarán residiendo en Estados Unidos ya que es en ese país donde tienen sus respectivas ocupaciones. “Yo no he tirado de Juan hacia América, no me lo he traído a mi terreno; ha sido el destino porque ahora su trabajo está radicado aquí”, comenta la que fuera elegida Miss México.

En un futuro, no descarta trasladarse a España, un país que adora: “Me entristece que digan que no me gusta España. Es todo lo contrario: España y los españoles me encantan porque si no, no podría estar casada con uno como Juan, que es más español que...la Cibeles”.

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