23 MAYO 2001
Paloma Lago cumplió ayer 34 años y para celebrarlo reunió a sus amigos más íntimos en un céntrico restaurante oriental. Entre ellos, estaba el joven nadador Felipe López Ferreiro, con el que la guapa presentadora mantiene una relación desde hace varios meses.

Paloma prefiere ser lo más discreta posible en lo referente a su vida privada y, aunque no oculta su relación con el nadador gallego, evitó ser fotografiada con él. El grupo de amigos disfrutó de una agradable velada en la que no faltaron unas botellas de cava para brindar por la presentadora.

A la salida del restaurante, Paloma comentó lo feliz que se sentía: “Mis amigos se han portado muy bien, me han hecho muchos regalos pero lo importante es han estado aquí”.

'Uno de los momentos más felices de mi vida'
La cara de Paloma Lago demuestra que su romance con el nadador coruñés de 22 años marcha estupendamente. “Estoy muy feliz. Me encuentro en uno de los momentos más felices de mi vida y creo que eso se refleja en mi cara y en todo lo que hago. No me puedo quejar porque la vida me trata muy bien y disfruto al máximo de todo lo que me ofrece”, aseguró la presentadora gallega en una reciente entrevista.

Pendiente de su hijo
Desde que Paloma Lago y Javier García Obregón decidieron separarse hace casi un año, la presentadora se ha volcado en el cuidado de su hijo, el pequeño Javier. También ayer, como hace todos los días, Paloma recogió al niño del colegio y disfrutó con él del día de su cumpleaños. El pequeño Javier ha sido siempre la principal preocupación de su madre. Cuando en una entrevista le preguntábamos por como había asumido el niño la separación de sus padres, Paloma contestaba : “Mi hijo está feliz. Creo que somos unos padres estupendos. Mi hijo nos demuestra todos los días que es muy feliz y su padre y yo nos podemos colgar una medalla de oro”.