No hay más que verla. Tras superar los problemas que la llevaron a ingresar en una clínica, Melanie Griffith vuelve a ser la que era. Aparece nuevamente radiante. Como siempre lo ha estado.

Pero esta fulgurante recuperación no es fruto del azar. Se debe, por un lado, a su naturaleza luchadora y, por otro, al enorme cariño y apoyo que le ha prestado su marido, el famoso actor español Antonio Banderas, y sus tres hijos, en cuya compañía ha disfrutado de estas entrañables fiestas navideñas. “Ahora estoy en casa con mi familia, después de lo duros que fueron esos ocho días”.

Y es que, para Melanie, su hogar es fundamental: “Mi casa representa el sentimiento de estabilidad que esperamos crear para nosotros y nuestros hijos”, confesaba la actriz recientemente.

Melanie no sólo atraviesa un buen momento personal. Actualmente, disfruta también de una inmejorable racha profesional: ha vuelto a su trabajo como actriz y ha sido nominada para el Premio Manzana de Oro, que desde hace sesenta años entrega el Club de Prensa Femenina de Hollywood. Y, por si fuera poco, además de interpretar, Melanie se ha introducido en el mundo de la producción de la mano de su marido con su pequeña empresa, Green Moon. La pareja debutó en su nueva faceta de productores con Locos en Alabama, una película dirigida por el propio Banderas y protagonizada por Melanie Griffith.