16 NOVIEMBRE 2000
Paloma Lago, cinco meses después de haberse separado de su marido Javier García Obregón, se enfrenta a una nueva vida en compañía de su hijo, sin ningún tipo de miedo o temor. La popular modelo y presentadora conduce el programa infantil TPH club. Es una mujer llena de proyectos e ilusiones. Su vida está centrada en su hijo, con cuyo padre mantiene una excelente relación. Paloma Lago desea llevar una vida lo más discreta posible, aunque en los últimos días su nombre haya estado en los medios de comunicación después de la aparición de unos rumores que la relacionan con un político valenciano.


Paloma, ¿cómo ha transcurrido tu vida desde este verano hasta ahora?
La verdad es que me he reencontrado con muchas cosas que estaban aparcadas o aplazadas. Ahora doy clases de inglés, me he conectado a Internet, hago mucho deporte...

¿Has cambiado mucho desde que te separaste de Javier, antes del verano?
Sigo siendo la misma. Tanto las cosas buenas como las menos buenas no me han hecho cambiar. Soy una persona muy transparente. No soy capaz de convertirme en alguien diferente por las circunstancias que me rodeen. Lo que es cierto es que hoy miro la vida con una sensación de que tengo que enfrentarme a ella sola y eso da mucha fuerza.

¿Javier será siempre un amigo?
Yo tengo en Javier a un amigo y al mejor padre para mi hijo. Porque es su padre y un padre excepcional. Creo que eso nadie que le conozca lo duda.

¿Cómo vive tu hijo la nueva situación?
Mi hijo está feliz. Creo que somos unos padres estupendos. Mi hijo nos demuestra todos los días que es muy feliz y su padre y yo nos podemos colgar una medalla de oro.

Cambiando de tema, últimamente te han relaciona con un político valenciano.
Esos rumores confirman mi teoría de que hay gente que no entiende que puedo ser feliz estando sola. No tengo ninguna intención de cubrir con prisas ese hueco. Sé que la vida lo hará algún día y que, en ese momento, me daré cuenta del valor que tiene saber esperar.

Pero el rumor está ahí, Paloma
Cuando he empezado a salir y a hacer mi vida normal, cuando he empezado a trabajar y me han visto sonreír y me han escuchado decir que mi interior está feliz y se refleja en mi cara, todo el mundo ha pensado que lo único que puede provocar eso es que me haya enamorado. Y yo desde aquí digo que se puede ser tan feliz, reencontrándote contigo misma, volviendo a vivir de una manera libre, afrontando las cosas solas y sabiendo que no has dejado a nadie herido en el camino, sino todo lo contrario.

¿Cómo ves el futuro?
Si lo pienso tranquilamente, creo que me apetece que me sorprenda. Me gusta descubrir las cosas poco a poco. Así que quiero dar un voto de confianza al futuro porque creo que va a traer las mejores cosas que me pueden ocurrir. Estoy segura.

¿Qué enseña una ruptura?
Es como si hubiera retrocedido diez años, pero no en edad ni en actitud de vida, sino en que empiezas de nuevo, pero con mil cosas vividas que te hacen ser más sabio.

O sea que juegas con ventaja...
Yo creo que sí. Siempre que lo mires de una manera positiva juegas con ventaja. Siempre hay un primer día. Yo me ilusiono mucho por eso, porque sé que la vida me tiene muchas cosas maravillosas y quiero que sea así. Lo más importante es confiar y creer en ello para que se haga realidad. Soy una persona muy positiva, de verdad, y pienso que es la fórmula perfecta para ser feliz.