“Aún encuentro a Mick muy atractivo. Estoy loca por él. Es un cielo y le quiero. Por lo menos ambos estamos solteros, así que cualquier cosa que ocurra a partir de ahora está legitimada”

“Mick y yo congeniamos desde el primer momento. Es un hombre muy inteligente y gracioso, y yo también tengo esa cualidad”

Luciana, Mick Jagger y su hijo Lucas, fotografiados la pasada semana paseando por un parque de Londres

5 OCTUBRE 2000
Hace ahora un año nació Lucas, el hijo de Mick Jagger, líder de los Rolling Stones, y Luciana Morad, una bella modelo brasileña a la que el cantante conoció en Río de Janeiro. La noticia del embarazo corrió como la pólvora por todo el mundo y Jerry Hall, hoy ex mujer de Jagger, pidió inmediatamente el divorcio. Pero los problemas no se acabaron ahí para el músico. Luciana exigió una pensión de seis millones de pesetas mensuales para el pequeño y llevó el caso a los tribunales. “Ha sido un asunto público muy largo –comenta Luciana-. Con toda sinceridad estaré muy contenta cuando todo este tema económico finalice. Ambos queremos lo mejor para Lucas. Simplemente aún tenemos que llegar a un acuerdo sobre cuánto cuesta eso”.
A pesar de todo, Luciana confiesa sentir todavía algo por Jagger: “Aún le encuentro muy atractivo. Estoy loca por él. Es un cielo y le quiero. Por lo menos ambos estamos solteros, así que cualquier cosa que ocurra a partir de ahora está legitimada”. Hablan con frecuencia por teléfono y cada vez que pueden se reúnen en Londres para que Jagger vea a su hijo. Jerry Hall, siempre elegante, propuso que Lucas conociera a sus hermanos. “Es muy hermoso de su parte –afirma Luciana- sugerir eso y estoy plenamente de acuerdo en hacerlo. Sería estupendo que Lucas hiciera amistad con Gabriel porque son de la misma edad. Hagámoslo agradable para todos ellos. No es nada del otro mundo, ya que son hermanos por parte de padre”.