El pasado verano la Casa Real sueca confirmó su relación y ahora, cuatro meses más tarde, Carlos Felipe y su novia, Sofía Hellqvist se han mudado a la casa que posee el Príncipe al sur de Estocolmo, según han informado la revista Svensk Damtidning. Después de varios meses de especulaciones acerca de si ya vivían juntos o no, sobre todo después de ver al hijo de los Reyes de Suecia comprando muebles en Ikea y de que ella estaba más tiempo en esa casa que en la suya, parece que la mudanza ha terminado.
El “nidito de amor” de la pareja es una casa que Carlos Felipe recibió de una herencia y que han renovado para adecuarla a su gusto. Esta residencia, cuenta la prensa sueca, que era el lugar en el que él tenía pensado vivir con la mujer que se convirtiera en su esposa. Y es que la relación, que comenzó hace casi un año, ha ido avanzando a pasos agigantados, tanto que Sofía ya conoce a los padres de su novio, los reyes Silvia y Carlos Gustavo de Suecia.
El Príncipe parece decidido a convertir a Sofia en su prometida, pese a las reticencias mostradas inicialmente por los Reyes hacia la joven por ser popular en su país después de haber participado en el reality show "Paradise Hotel" y además, posar desnuda para una revista. Así lo han confirmado fuentes cercanas a la pareja, que además apuestan por que el anuncio del compromiso oficial no está muy lejano, así que podrían volver a sonar campanas de boda en Suecia antes de lo previsto.