Tal y como hicieran hace 24 horas los Reyes, don Felipe y doña Letizia han querido estar con los heridos y los familiares de las víctimas del trágico descarrilamiento del tren Alvia, y han puesto rumbo a Santiago de Compostela, donde han visitado el Hospital Clínico hacia las 17:55 horas de la tarde, media hora más tarde de lo que estaba previsto, para mostrar su solidaridad y apoyo con los afectados.
Doña Letizia, que para poder asistir ha suspendido el único acto oficial que tenía previsto para este viernes, la inauguración de una residencia de mayores en Azucaica (Toledo), que iba a presidir acompañada de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, lucía de riguroso luto y llegaba al centro hospitalario acompañada del Príncipe Felipe, que llevaba pantalón gris y chaqueta azul marino. Junto a ellos, se encontraban la ministra de Fomento, Ana Pastor, y la de Sanidad, Ana Mato, además del presidente de la Xunta Galicia, Alberto Nuñez Feijóo, entre otras autoridades.
Ante la catástrofe del tren Alvia, que descarriló el miércoles por la noche en una curva cuando se acercaba a la estación de Santiago, la Familia Real ha mostrado desde el primer momento su respaldo a las víctimas y sus familiares. Así, además de difundir una carta de condolencia en la web de la Casa Real, don Juan Carlos y doña Sofía acudieron este jueves por la tarde a Santiago para interesarse por la situación de los heridos en el accidente ferroviario que ha costado la vida a 78 personas, según ha determinado la Policía Científica. "Toda España está pendiente de esto y todos los españoles se unen al dolor de las familias de los muertos", declaró el soberano. "Lo único que puedo decir es que tenemos unidos a todos los españoles en este momento y estamos con todas las víctimas, con las familias y con los amigos de las víctimas", añadió.
El formato de la visita de los Príncipes de Asturias ha sido similar a la que hicieron los Reyes, tal y como han explicado desde la Casa del Rey, que por ahora mantiene en su agenda oficial la asistencia de don Felipe, mañana en Barcelona, a la cena de gala que se celebra con motivo de los XV Campeonatos del Mundo de Natación. Tras visitar el Hospital Clínico de Santiago, posteriormente se han desplazado hasta la localidad de Angrois para visitar la zona del suceso y conocer de primera mano la evolución de los trabajos de recuperación del lugar.
Los vecinos fueron los primeros en acudir, nada más producirse el accidente, a ayudar a las víctimas, y los Príncipes les han agradecido con su visita aquel gesto y el "valor" y "coraje" demostrados, como ha dicho Don Felipe en su discurso final de este viaje. Y a ellos directamente, don Felipe les ha dicho: "En un momento dado, la vida nos pone a prueba y vosotros habéis demostrado coraje para ayudar en un momento muy difícil. Habéis dado un ejemplo al mundo".
Al igual que en el Clínico, casi una hora han estado los Príncipes de Asturias en este barrio, donde han ido saludando, casi uno a uno, a los más de cien vecinos que se han congregado, dándoles las gracias por su intervención y preguntándoles cómo vivieron ese momento. Ambos se han mostrado cercanos y cariñosos con los habitantes de este pequeño barrio de las afueras de Santiago, sobre todo con los niños, algunos de los cuales han entregado unas flores a doña Letizia como agradecimiento a su visita.
Uno de los vecinos, José Blanco, ha expresado al Príncipe su deseo de que se coloque un monumento o una placa en reconocimiento de los vecinos que ayudaron tras el accidente y de que sea el Príncipe quien lo inaugure, a lo que don Felipe ha contestado afirmativamente.
Tras esta emotiva visita, los Príncipes han estado con representantes de los principales grupos de profesionales que han trabajado desde el miércoles por este accidente. Forenses, bomberos, agentes de la Guardia Civil, las policías local, autonómica y nacional, trabajadores de Protección Civil y el 061 y miembros de la Cruz Roja han escuchado el discurso de Don Felipe en el que ha subrayado la profesionalidad de todos y la "espectacular reacción espontánea" de los ciudadanos. "España puede estar orgullosa de Galicia y los gallegos muy orgullosos por esto", ha dicho el Príncipe, quien espera que este reconocimiento ayude a todos a "sobrellevar el dolor y la tristeza" por lo ocurrido. Incluso ha querido mostrar su "apoyo y afecto" a los responsables de las empresas afectadas por el siniestro, Adif y Renfe, "que han sufrido sin duda muy de cerca todo lo ocurrido".
En cualquier caso, ha recordado que el motivo de su viaje ha sido también el de "compartir el dolor de las familias, de los allegados por la pérdida de sus seres queridos" y acompañar a algunos de los heridos, para transmitirles su cariño y el deseo de que todos se recuperen lo más rápido posible. Al finalizar este discurso, don Felipe y doña Letizia han conversado durante varios minutos con muchos de los miembros de los servicios de emergencias, para después finalizar esta emotiva visita a Santiago.
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