Sevilla vivió ayer una tarde memorable. La festividad del Corpus que se celebraba se vio engrandecida con la presencia de Su Majestad el Rey, que fue el encargado de inaugurar una estatua ecuestre levantada en honor a su madre, doña María de las Mercedes, en la Real Maestranza de Caballería. Don Juan Carlos, que fue recibido con vítores y aplausos de júbilo, estuvo acompañado por su hija mayor, que volvía así a la ciudad que fue testigo de su boda hace trece años.
La [Duquesa de Lugo], de nuevo muy sonriente como en sus últimas apariciones públicas desde el anuncio del "cese temporal de su convivencia" con Jaime de Marichalar, vistió de color crema y lució una espectacular mantilla del mismo tono que trajo a la memoria aquellas primeras tardes de toros que [doña Elena] disfrutó desde el palco presidencial de la Maestranza. La Infanta portaba en las manos un bouquet de flores realizado por Concepción Halcón Álvarez, esposa del teniente hermano mayor, Alfonso Guajardo-Fajardo.
En su intervención ante la Junta de la Real Maestranza y frente a numerosas autoridades que se sumaron al emotivo homenaje, el Rey agradeció el gesto que tanto el autor de la estatua, Manuel García Delgado, como la Fundación de la Real Maestranza y el Ayuntamiento de Sevilla -encargadas de levantar el escultura- han tenido en memoria de la [Condesa de Barcelona], de quien subrayó "el inmenso cariño que guardó toda su vida por la gente de la ciudad" así como la gran afición que tenía a la fiesta nacional. [Don Juan Carlos], que es hermano mayor de la de la Real Maestranza, calificó el homenaje como "nuevo motivo de alegría" y añadió que Sevilla, "octava maravilla y plaza universal", alberga "un inmenso caudal de arte y cultura".
Presidieron la corrida del Corpus
Tras descubrir la placa y saludar, entre otras personalidades, al alcalde de la ciudad, Alfredo Sánchez Monteseirín, a Gaspar Zarrías, Vicepresidente Primero de la Junta, y al cardenal de Sevilla, Carlos Amigo, el Rey y la [infanta Elena] presidieron la tradicional corrida del Corpus Christi en la plaza de toros de la capital andaluza. Como dos grandes aficionados que son, padre e hija disfrutaron de una espléndida tarde taurina.
Tampoco faltaron a la fiesta don Carlos de Borbón-Dos Sicilias y Borbón, Infante de España, y doña Ana de Orleáns, Princesa de Francia. Sentada junto a ellos estaba otra gran amante de los toros, la [Duquesa de Alba], que acudió acompañada de sus grandes amigos [Curro Romero] y [Carmen Tello]. El monarca recibió el brindis de los toreros que protagonizaron el festejo: Diego Ventura, gran triunfador de la tarde,Oliva Soto, que tomaba la alternativa, Curro Díaz y Salvador Vega.