Los príncipes daneses Federico y Mary viajaron ayer hasta Bruselas, para participar en el acto oficial con el que se conmemoraba que Dinamarca ha asumido la presidencia del Consejo de la Unión Europea este mes de enero. A su llegada, los príncipes herederos visitaron el denominado Justus Lipsius, la Sede del Consejo, cuya decoración para los próximos seis meses, período que dura la presidencia danesa, incluye obras de varios jóvenes artistas daneses.
Después de esta primera visita, llegó la hora de reunirse con sus amigos, los príncipes Felipe y Matilde de Bélgica, con quienes asistieron a un concierto de gala celebrado en su honor. A los príncipes herederos daneses y belgas les une una gran amistad, que quedó perfectamente reflejada en el efusivo reflejo que se dieron al encontrarse a la entrada del recinto en el que tuvo lugar el concierto. Durante el tiempo que durará la presidencia de la Unión europea, se verán en más ocasiones, ya que los príncipes daneses tendrán que asistir a varios actos.
Las princesas Mary de Dinamarca y Matilde de Bélgica, cada una fiel a su estilo, volvieron a dar una lección de elegancia. Mary eligió para la ocasión un conjunto blanco perla que combinó con un abrigo del mismo color adornado con pedrería y unos originales zapatos dorados. Por su parte, Matilde lució un vestido negro de media manga, por encima de la rodilla y entallado a la cintura con unos pendientes de brillantes en forma de corazón.
Los encargados de abrir esa noche de música para celebrar la presidencia de Dinamarca fueron la "Big Band" de la Radiotelevisión danesa, y o hiceiron a ritmo de jazz, y después actuaron también otros artistas del país.
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